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Una veintena de artesanos vistieron de tradición La Sala de la Fedac en 2016

  • El Cabildo recuperó este local para destinarlo a formación, exposición y comercialización

Una veintena de artesanos vistieron La Sala de la Fedac del Cabildo de Gran Canaria con sus creaciones a lo largo del pasado año 2016 cuando el lugar, que estaba destinado a tienda, fue reconvertido en espacio de exposición, comercialización y formación.

 

Con esta iniciativa, el Cabildo busca la interacción entre la ciudadanía de la Isla y el mundo de la artesanía y sus profesionales en un lugar donde los protagonistas son los artesanos y sus obras, informó la consejera de Industria, Comercio y Artesanía del Cabildo de Gran Canaria, Minerva Alonso.

 

El espacio ya reconvertido fue inaugurado a finales de marzo con una exposición para celebrar el Día de las Artesanías y donde tuvo lugar la muestra del trabajo de artesanos de muy diversas disciplinas, entre las que destacó una caladora que tejió para el público.

 

A partir de ahí, cada semana o quincena, La Sala de la Fundación para la Etnografía y el Desarrollo de la Artesanía Canaria (Fedac) acoge una representación de trabajos de variadas disciplinas artesanas de Gran Canaria, como las piezas en cerámica de Gustavo García, el forjador Domingo Alemán o la marroquinería de Leonor Alcaíno.

 

Tampoco faltaron a la cita el modelador Álvaro Lozano, la jabonera Loreto Herrera o la vidriera Tuula Giraldo, entre otros artistas, a los que se sumaron disciplinas como el macramé, la manipulación y el reciclado del papel y el cartón, la decoración de telas y el maquetismo.

 

El mes de agosto fue el más completo de la temporada con la muestra de cuatro alfareros que ofrecieron al público en general un ejemplo de su hacer más tradicional y que tuvo una excelente respuesta por parte de los visitantes.

 

La acogida del público fue destacada, tal y como demuestran las numerosas visitas recibidas en La Sala en las horas en las que la instalación permaneció abierta, ubicada en la calle Domingo J. Navarro de la capital grancanaria.

 

Por su parte, los artesanos demostraron desde el principio su apoyo a esta iniciativa que les permite no sólo exponer sus trabajos sino, además, generar ventas, ya que los visitantes pueden adquirir los productos en la misma Sala.

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