Cada 25 de diciembre, Navidad, el bello barrio de Veneguera celebra su Belén Viviente, una tradición que cumple ya treinta y siete años gracias al respaldo que siempre muestran las personas asistentes, pero sobre todo por la implicación de los más de 150 vecinos y vecinas que de una forma u otra participan en este particular nacimiento de Jesús con toque canario, que cuenta asimismo con la representación oficios y actividades tradicionales, degustaciones y música en vivo.
El evento, organizado por el Colectivo Belén Viviente de Veneguera con la colaboración del Ayuntamiento de Mogán, atrajo a familias de toda la isla y a muchos turistas que pudieron presenciar a partir de las 17:30 horas la especial Misa de Navidad en la iglesia del barrio. En ella participaron niños y niñas ataviados con la vestimenta tradicional canaria, pero también Cathaysa Ramírez y Rayco Antonio Vega, vecinos que han representado a María y a José junto al Niño Jesús, rol que durante las primeras horas protagonizó la bebé Elsa Sánchez y más tarde Sophie Fernández.
Al finalizar la liturgia, en la plaza anexa al templo, un grupo de danza folclórica de las Escuelas Artísticas de Mogán, del que además formó parte la alcaldesa de Mogán, Onalia Bueno, junto a niños y niñas del barrio, dedicaron el tradicional baile de ‘La Cunita’ a María, José y el Niño Jesús. Seguidamente los tres Reyes Magos, muy canarios, los agasajaron con sus ofrendas. Luego, con toda la comitiva, custodiada por un burrito, música del Archipiélago y todas las personas asistentes, se dirigieron al espacio natural La Cardonera para ocupar su lugar en el portal y dar comienzo a la representación de casi más de cuarenta escenas protagonizadas por vecinos y vecinas de Veneguera y el casco de Mogán.
En esta edición del Belén formaron parte, entre otros, el carpintero, herreros, el pedrero, el artesano de juegos de madera y del cuerno, el carbonero, las y lavanderas, las planchadoras, el ahumador y labrantes de la tierra. Además, contó con un espacio de elaboración de gofio, un almacén de empaquetado de tomates, una casona canaria con exhibición de juguetes de verga y una fiesta canaria estilo años 70.
También tuvieron presencia las labores de ganado con la era del caballo, el chiquero y la yunta de vacas, un espacio de apicultura así como otros relacionados con la agricultura como las fincas de tomates, plátanos y millo. Durante el recorrido fue posible disfrutar de demostraciones del salto del pastor y participar en actividades de ocio comunes del pasado como la ruleta y la pesca de la botella.
Los y las visitantes, entre estos concejales y concejalas de la Corporación municipal, también pudieron probar el pan de puño recién hecho, chocolate caliente, tortillas de calabaza, bollos, pella de gofio, suero, caldo, naranjas, las delicias de la ‘Tienda de aceite y vinagre’, café e infusiones. En este día festivo, uno de los más importantes del año, estuvo muy presente música en vivo con la Agrupación Folclórica Umiaya, de San Fernando de Maspalomas, la parranda Los Tempranillo, y la Agrupación Folklórica y Cultural Labrantes, procedente de Arucas.