ACUERDO CLAVE QUE DIFUNDIRÁ EL LEGADO Y LA HISTORIA DE LOS CANARIOS QUE MARCARON LA VIDA EN TEXAS
Hoy lunes, 3 de abril, en la sede del Real Club Náutico de Gran Canaria se produjo un encuentro muy especial que aportó “más luz” en el conocimiento sobre lo que los canarios representaron en Texas, en su historia y en su filosofía de vida.
Estuvo presente el cirujano Don Alfonso Chiscano, muy popular por su importante labor como médico en Nueva York y en Houston, que llegó designado por el Ayuntamiento de San Antonio de Texas, como representante y mandatario de dicha ciudad y como vicepresidente del Comité Ejecutivo para la conmemoración de la fundación de San Antonio por los canarios. Junto a él, Don Armando Curbelo Fuentes, quien vio como sus dos libros: “Fundación de la ciudad de San Antonio de Texas. Canarias, la gran deuda americana” y “Crónicas canarias en Texas” se traducirán al inglés para que tengan difusión en las escuelas y universidades americanas, principalmente en Texas. Un acuerdo firmado en nuestro Club que marca la historia y los lazos de unión entre Canarias y Texas.
Tampoco faltó a esta importante cita el presidente del Real Club Náutico de Gran Canaria, Fernando del Castillo Morales, que propició este encuentro y que apoya esta iniciativa.
Alfonso Chiscano afirmó que: “el año que viene es clave pues celebraremos los 300 años de la fundación de San Antonio de Texas y queremos incluso hacer un monumento conmemorativo donde se refleje la relevancia de los canarios que fundaron y marcaron la historia de ese importante lugar del mundo”.
Destacó también: “el hecho de que se traduzcan los dos libros de Armando Curbelo al inglés y que lleguen a las escuelas y universidades, es otro paso decisivo para no olvidar la relevancia de los canarios en Texas. Supone un estímulo para la gente joven y un motivo más de celebración”. Agradeció la labor de Curbelo, “que con tiempo, intensidad y paciencia ha escrito unos libros que deben llegar al mayor número de personas posible” puntualizó.
Fernando del Castillo Morales, les entregó unas metopas tanto a Alfonso Chiscano como a Armando Curbelo. De este modo, el presidente de nuestra entidad quería reconocer el esfuerzo de ambos porque se valore y aprecie la decisiva labor de los canarios en Texas y que no se pierda esta parte clave de la historia.
Para el autor de los libros, Armando Curbelo, “es muy importante este paso ya que por fin se reconoce en Texas, que antes de que llegasen los del norte tras vencer en la guerra, los canarios ya habían estado allí 135 años”.
La primera visita a Texas de Curbelo fue en 1978. Conoció al arzobispo que se mostraba extrañado sobre que no se hablase de la influencia canaria en Texas y le puso en contacto con un bibliotecario y archivero, que era descendiente del primer alcalde de San Antonio, Juan Leal. Tras lograr leer unos documentos relevantes sobre los canarios en el lugar, siguió investigando en el archivo de Indias y en la biblioteca del Congreso en Washington. “Los americanos están en deuda con nosotros y me siento muy orgulloso de ser canario”, puntualizó Curbelo.
A todos los canarios que llegaron a Texas se les propuso tierra y agua gratis aunque luego, el tema del agua no fue como se les dijo a los primeros canarios. De todos modos, “la infraestructura del agua contaba con un sistema de riego como el de la Heredad de Tenoya, en Gran Canaria. Hasta en eso supusimos un avance”, afirmó Armando Curbelo.
Aún hoy en día hay palabras y expresiones en español que se mantienen tras siglos, entre los descendientes de canarios allí. Palabras como: “cambado”, expresiones como “vuelta de carnero” aún se dicen.
Los lazos de Canarias con la ciudad de San Antonio de Texas se remontan al Siglo XVIII: fueron un grupo de medio centenar de isleños, emigrados por imperativo de la Corona de Castilla los que se asentaron en el año 1731 en San Antonio, convirtiendo el núcleo original de la población en una incipiente urbe que llegó a ser capital de Texas, y que en la actualidad es uno de los principales centros urbanos de todo el Estado (junto a Dallas y a Houston), con una población de más de un millón de habitantes.