Llega el domingo día 12 de junio, al Teatro Guimerá de Santa Cruz de Tenerife, la secuela de la comedia teatral ‘El Trámite 2’, el nuevo y disparatado montaje cuya dirección y guion ha confiado la productora canaria Acelera a la actriz sevillana Cristina Medina, protagonista de la popular serie ‘La que se avecina’. Junto a ella, los intérpretes Yanely Hernández (‘En Clave de Já’), Mingo Ruano (’Sin sombra de Grey’) y Kike Pérez (‘Dentadura PosRisa’), protagonizan esta pieza escénica cuyo estreno en la isla de Tenerife tendrá lugar a las 19.00 horas, para luego proseguir gira por las Islas.
El argumento de esta segunda entrega de ‘El Trámite’ nada tiene que ver con el estreno del pasado año en el que también intervino el conocido actor catalán Jordi Sánchez. Medina escribe, dirige e interpreta esta comedia de atípicos superhéroes fracasados del siglo XXI, a los que poco importa la misión que les ha sido encomendada. “Es una creación propia que sale de la nada y que no está inspirado en ningún texto, en el que cualquier hecho con la realidad que el público perciba en el montaje es pura coincidencia”, advierte Medina.
“Se trata de una historia de misterio de una hora y media y quince minutos de duración sobre unos agentes especiales que no valen para nada, a los que se les ha encomendado una misión secreta. La historia se desarrolla entre robos de maletines que contienen información importante y sensible y varios asesinatos. El montaje, que posee un código estético cercano al absurdo del clown, está repleto de gags visuales y verbales que conectan muy bien con un público que apuesta por un teatro de evasión”, sostiene Cristina Medina.
Las situaciones tragicómicas se suceden en el montaje, y los cuatro actores demuestran con los distintos papeles que encarnan, que son unos excelentes maestros manejando el registro cómico y los respectivos alter egos que les han sido asignados. La directora añade que el montaje ha crecido con la aportación de ideas y juegos escénicos de los protagonistas durante el proceso de ensayos de la comedia. “Éste es un espectáculo de ‘Comedy’ en directo, de locura, en donde el público no puede creerse nada de lo que sucede sobre el escenario. Es un pretexto para que el público se parta el pecho en la butaca desde que llega al teatro hasta que sale de la función camino de su casa”, dice la sevillana.
‘El Trámite 2’ aspira a convertirse en la producción cómica de este verano. Medina viene trabajando desde hace meses en el guion de esta pieza que incide en la estética y en la manera particular que tiene esta camaleónica y enérgica actriz andaluza de entender el teatro. “La única pretensión debe ser que la gente se rompa el pecho en la butaca”, sostiene. “Es mi lenguaje. Si ves una película de intriga y te preguntas si es posible mantener la intriga una hora, la respuesta es ´más te vale´. Me sostengo con el humor absurdo y anárquico. Si me preguntas si es posible mantener la seriedad una hora, te digo que no, no puedo, no sé hacerlo”, confiesa la actriz.
Según señala el humorista lanzaroteño Kike Pérez, que ya estuvo en la primera entrega de la comedia junto a Mingo Ruano y el popular actor catalán Jordi Sánchez, esta nueva versión que dirige Medina, “vuelve a ser un batiburrillo de personajes, todos en uno y uno en todos, con una nueva trama y dos nuevos papeles femeninos, aunque los códigos de diversión ligera y fresca se siguen manteniendo. Esta versión me permite construir los personajes de mi yo más interno, así que todo rueda y la comedia fluye mucho”, admite el humorista lanzaroteño.
Mingo Ruano confiesa que esta comedia ha sido “una aventura de juego, porque trabajamos la comedia desde un enfoque lúdico, a modo de golfada”. Ruano, que dirigió la precuela estrenada el pasado año con mucho éxito, se apresura a destacar que “este Trámite nada tiene que ver con los códigos del anterior. Son comedias totalmente distintas. No se parecen en nada. Cambia la dirección, el guion, parte del elenco y los códigos estéticos”, dice.
Por su parte, la actriz Yanely Hernández avanza que detrás de este estreno “se ha producido un proceso abierto de investigación en el que hemos recuperado el espíritu lúdico y el juego teatral de la comedia como género. Nuestro humor raya lo absurdo y el espíritu del clown está presente en toda la función”.