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‘Líder’, que tras un período de residencia se exhibirá los próximos 9 y 10 de febrero a las 20.30 en el recinto de Primero de Mayo, es una distopía sobre el poder de líderes desgastados
‘Líder’, del periodista de Televisión Canaria Paco Sánchez, ha sido la obra seleccionada para su exhibición en la Sala Insular de Teatro (SIT) en el marco de la última edición de ‘Canarias Escribe Teatro: Nuevas Voces’, un proyecto para el fomento de la autoría teatral isleña impulsado por 2RC Teatro Compañía de Repertorio, la Fundación SGAE, el Gobierno de Canarias y el Cabildo de Gran Canaria a través de la Fundación de las Artes Escénicas y de la Música, que gestiona la propia SIT y destina 10.000 euros a esta iniciativa de carácter anual.
Dirigido por Luis O’Malley y protagonizado por los actores Víctor Formoso, Alicia Ramos y Mingo Ávila, el montaje, que cuenta la historia de un gobernante que trata de guiar al pueblo mientras duerme y de los encargados de cuidar su salud, podrá verse, tras dos semanas de preparativos (residencia) que arrancaron este lunes, el 9 y el 10 de febrero a las 20.30 horas en el recinto de Primero de Mayo.
La obra transcurre en una habitación donde todos están encerrados, cada uno dentro de su propia cárcel. El líder tiene más de cien años, pero no los aparenta porque está congelado, y los cuidadores tienen muchos menos, pero aparentan más porque son los encargados de descongelarlo. Y es que, en esta distopía el tiempo no pasa para el poder, se para en favor de los poderosos, que, paradójicamente, no pueden evitar que la revolución les estalle a las puertas de casa.
“No es un drama, y, si uno lo piensa bien, igual una comedia tampoco, aunque reírte te ríes”, explica Sánchez, que ha contado en el proceso de creación con el asesoramiento del prestigioso especialista Alberto Conejero, al que agradece su ayuda y su guía. “Alberto y yo entendemos el mundo en general y el teatro en particular de formas muy distintas. Precisamente gracias a eso este texto se ha visto beneficiado: la sabiduría y sensibilidad de Alberto, que muy generosamente puso a mi disposición, me sirvieron para llevar este texto a lugares a los que a mí solo no se me habría ocurrido acudir”, añade el autor, que cita como referentes de su trabajo a Jack Kirby y Alan Moore.
En teatro, el autor, que desde hace más de quince años también escribe noticias en los servicios informativos de la Televisión Canaria, ha firmado ‘La última batalla del Capitán Ultrapoder’ y ‘Tanto por ciento’, estrenadas por 2RC Teatro en forma de lecturas dramatizadas, y la dramaturgia de ‘Los cuatro de Bremen’ para los Conciertos en Familia de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria, así como las piezas de microteatro ‘Ouijapp’, ‘Idiotas’ y ‘Guarda y custodia’, todos ellas premiadas en los concursos de la extinta Sala Bambalinón de Las Palmas de Gran Canaria. Además, pertenece al colectivo Eje del Mal, cuyo texto ‘Jiménez y Asociados’ fue considerado uno de ‘Los clásicos’ (los que más éxito tuvieron) de Microteatro por Dinero (Madrid) en 2017.
Desde solo 10 euros, las entradas para las funciones de ‘Líder’ están a la venta en la taquilla del Teatro Cuyás y en la web www.salainsulardeteatro.com, y aproximadamente hora y media antes de cada pase lo estarán también en la taquilla de la propia SIT (Avda. Primero de Mayo, s/n, Las Palmas de Gran Canaria).
Palabra de director. El director del montaje, Luis O’Malley, no duda en referirse a ´Líder’ como “uno de los ejercicios más arriesgados de la dramaturgia canaria de los últimos tiempos”. “Ante un texto así no queda otra que recoger el guante y seguir con el riesgo, con lo ilógico, pero parándonos a pensar que a través de lo absurdo Sánchez hace una crítica mordaz al poder, al populismo y a los líderes desgastados que se creen por encima de todo”, ahonda el director.
Y es que el absurdo es la clave de la propuesta de estética y dirección de ‘Líder’. “No todo cabe, pero casi todo sí”, aclara O’Malley, para quien “los actores juegan al límite sus personajes dentro de un espacio frío, una especie de sala futurista donde mantienen con vida al líder”.
“Todo resulta ilógico para el espectador, como el poder mismo. Todo hasta que al final de la historia va colocando la razón de ser del texto y descubrimos que el delirio de un loco ha acabado en revolución, en revueltas, en absurdo. Las piezas de un ajedrez que están incompletas y que a base de comedia el espectador irá completando para descubrir que sí, que el futuro ya lo tenemos al lado, por desgracia”, concluye el director.