Tras dos meses de intensas actividades, en la jornada de este viernes, 31 de agosto, se clausuraba en la Villa de Ingenio el Proyecto Respiro Familiar que pone en marcha cada año en el periodo estival la Concejalía de Servicios Sociales, Igualdad, Mayores y Accesibilidad del Ayuntamiento de Ingenio. Este proyecto, financiado por el Cabildo de Gran Canaria, ha tenido como objetivo potenciar el desarrollo integral de personas con discapacidad en un entorno normalizado que signifique, a la vez, una alternativa de respiro para las familias durante los meses de julio y agosto desde un modelo integrador y educativo. El proyecto se desarrolló en la Casa de la Juventud ubicada junto al Centro Ocupacional para Personas con Discapacidad Intelectual con cuyos usuarios/as también compartieron actividades el primer mes.
En este tiempo se han realizado numerosas actividades y talleres de inclusión, propiciando y aumentando además las actividades de ocio en espacios libres para enfatizar la normalización de los chicos y chicas en su vida cotidiana a la vez que disfrutaban del buen tiempo. “Hemos realizado actividades y atendido todas las necesidades que nos han demandado haciendo diferentes salidas para disfrutar del verano yendo a la playa, al cine, haciendo excursiones a parques, visitas a Sioux City o Poema del Mar, terapia ecuestre, entre muchas otras, intentando siempre que disfrutaran al máximo a través de las emociones, las vivencias, el sentir,” explicaba la coordinadora, Almudena Arbelo León. Quiso además resaltar el gran equipo formado por las monitoras y los chicos y chicas, los cuales han sido “muy amorosos, han valorado mucho el trabajo que hemos hecho y se han cuidado los unos a los otros, por lo que ha sido muy fácil trabajar con ellos,” añadía Arbelo.
A lo largo del acto de clausura, al cual acudieron los familiares de los usuarios/as, se procedió a la proyección de un vídeo con imágenes de las actividades y salidas realizadas, se hizo una representación de un cuento elaborado por las monitoras cuyos personajes narraban y representaban alguna peculiaridad de la personalidad de cada participante del programa, se entregaron a los usuarios/as un Certificado de Excelencia así como los trabajos y manualidades realizadas en los talleres y se habló de varias palabras que adornaban el aula y que plasmaban el sentir del programa como superación, diversidad, respeto, diversión o tolerancia. El acto finalizó con un picoteo.
La concejala accidental de Servicios Sociales, Lorena Quintana, acudió al mismo, haciendo una valoración muy positiva del programa del cual “no sólo se han beneficiado los ocho chicos y chicas sino también sus familiares”. El alcalde de la Villa de Ingenio, Juan Díaz, tampoco faltó a la cita, mostrando su agradecimiento a las familias por haber confiado en este proyecto. “Hay muchos niños y niñas que están en sus casas y no tienen centros a los que acudir por lo que hay que seguir luchando para que servicios de este tipo se sigan ampliando,” comentó.