La alcaldesa de Santa Lucía y presidenta de la Mancomunidad, Dunia González, ha expresado su agradecimiento “a toda la gente que ha hecho posible que esta feria sea un éxito: técnicos y trabajadores municipales de lo Santa Lucía, Ingenio y Agüimes, personal de seguridad, protección civil, y de diferentes empresas de servicios” e hizo un balance positivo porque “la cantidad de gente que ha venido en esta edición demuestra que los productos de nuestra tierra tienen mucha demanda y esto nos da la razón a quienes llevamos años defendiendo un modelo económico sostenible que tenga en cuenta a nuestro sector primario y a las energías renovables”.
Pino Hernández Domínguez tiene 71 años y lleva “toda la vida siendo artesana de la ropa”. Nació en San Mateo pero hace tres décadas que vive en Santa Lucía y comparte su puesto de hilado de lana y tejeduría con su hijo Ángel. Pino nos cuenta que es hija de pastores “por eso amo la lana y los animales, y he vivido los quince años de esta feria”. Pino dice que “este año ha venido mucho gente, porque viene toda la familia, hasta el perrito. La feria sirve para muchas cosas, sobre todo te da mucha publicidad y te salen algunos encargos, a veces un bolso, una mochila… poca cosa porque la gente no tiene dinero y yo tengo chaquetas aquí que valen 400 euros porque la materia prima es muy cara y lleva meses de trabajo”.
La noche del sábado tuvo lugar la actuación de Bejeque y de Vocal 7. La Mancomunidad del Sureste reconoció a Flora Vélez que durante décadas estuvo al frente de una tienda de aceite y vinagre en Santa Lucía, por Ingenio fue reconocido el apicultor José González Catro (premio a la mejor miel de Gran Canaria concedido por el Cabildo de Gran Canaria) , y por Agüimes se reconoció a la artesana Sheila Valerón por ser una artesana innovadora en sus creaciones y por difundir la identidad canaria en su obra.
La Feria se clausuró este domingo a las 14 horas con la actuación del verseador Yeray Rodríguez. Niños y niñas de diferentes municipios subieron al escenario para compartir el arte del verso improvisado con Yeray Rodríguez y los músicos que lo acompañaron. Al final del espectáculo se sumó la banda Guayedra de Agaete.