Los aeropuertos canarios reciben desde el pasado jueves hasta ayer domingo a tan sólo 1.791 pasajeros procedentes de la península, reduciendo la media diaria de viajeros llegados del resto de España a 448, muy por debajo de los 10.000 diarios del pasado mes de febrero
Un total de 262.796 turistas lograron abandonar Canarias hacia sus destinos de procedencia en la última semana en las 1.597 operaciones aéreas de salida realizadas en los aeropuertos de las islas desde que se anunciaran el domingo 15 de marzo las restricciones para viajar que obliga el estado de alarma decretado para hacer frente a la propagación del coronavirus o COVID-19.
A pesar de la gran cantidad de viajeros y operaciones a realizar, estas salidas se han hecho de manera ordenada y escalonada para dar cumplimiento a las medidas de contención decretadas por el Gobierno de España para combatir la pandemia. El Gobierno de Canarias, en colaboración con AENA y otras entidades públicas y privadas, sigue trabajando para lograr que todos los turistas que aún quedan en las islas abandonen Canarias de forma escalonada en los próximos días.
“Se ha logrado repatriar a una cantidad récord de turistas con las dificultades que todos sabemos y que hemos visto en los aeropuertos especialmente esta última semana”, aseguró Franquis, “Se ha un esfuerzo enorme y quiero agradecer, en nombre del Gobierno de Canarias, el empeño puesto por los trabajadores en cada aeropuerto de Canarias, por intentar gestionar una situación que no era nada fácil, pero gracias al cual han salido de Canarias más de 260.000 turistas que estaban en nuestras islas, y se ha hecho, con alguna dificultad puntual, de forma ordenada y escalonada”.
El consejero añadió que desde la Consejería que él dirige se están coordinando los esfuerzos con otras consejerías del Ejecutivo regional y con AENA para mantener un ritmo similar para tratar de repatriar en el menor tiempo posible a los cerca de 10.000 turistas que se calcula que aún quedan en las islas. “Estamos ahora en la otra fase, tenemos una semana por delante para intentar que el resto de turistas que están ahora en el Archipiélago puedan volver a su lugar de origen sin mayores dificultades que las lógicas del cierre y limitación de la conectividad, pero el primer objetivo, que era que el grueso de esos turistas volvieran a sus hogares ya lo hemos conseguido”.
En lo que respecta a las llegadas del exterior, centradas en la península exclusivamente, los aeropuertos canarios recibieron entre el pasado jueves 19 de marzo, día que entraron en vigor las restricciones a la movilidad aérea, y ayer domingo, a 1.791 pasajeros llegados a las islas en alguna de las 17 conexiones que se mantienen abiertas con el resto del territorio nacional mientras dure el estado de alarma.
Desde que se activaros las restricciones a la movilidad aérea entre las islas y la península, el pasado jueves, los seis aeropuertos canarios que mantienen conexiones nacionales recibieron una media de 448 pasajeros al día, muy lejos de los más de 10.000 viajeros que, según datos de Promotur, accedían cada día a Canarias desde el resto de España el pasado mes de febrero.
La isla en a la que más pasajeros procedentes de la península llegaron desde el jueves al domingo fue Tenerife con 905 en sus dos aeropuertos, seguida de Gran Canaria, con 803, y, a gran distancia, Fuerteventura con 65 y Lanzarote con 18.
El tráfico aéreo interinsular también se ha visto afectado por las limitaciones de vuelos y de capacidad en sus aviones por lo que la media diaria de estas conexiones entre las islas se ha reducido a tan solo 270 pasajeros en todo el Archipiélago.
Una orden ministerial, aprobada a sugerencia del Gobierno de Canarias, establece que quedan prohibidos los desplazamientos entre las islas o de las islas hacia la península salvo que se justifique, mediante una declaración responsable, la necesidad inaplazable de viajar por las siguientes circunstancias:
-Garantizar el abastecimiento de bienes y servicios a la población.
-Asistencia a centros, servicios y establecimientos sanitarios.
-Desplazamiento al lugar de trabajo para efectuar su prestación laboral, profesional o empresarial.
-Retorno al lugar de residencia habitual.
-Asistencia y cuidado a mayores, menores, dependientes, personas con discapacidad o personas especialmente vulnerables.