“La niña de la mochila” el penúltimo intento del mundo abertzale para exigir el acercamiento de los presos.
La Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC), Asociación que engloba todas los Empleos y Escalas de la Guardia Civil, por medio del presente comunicado pone en conocimiento de la Opinión pública lo siguiente:
Mochilaren Umea, si lo prefieren La niña de la mochila, es el penúltimo intento del entorno abertzale, encabezados por EH Bildu, para exigir el acercamiento a Euskadi de los presos etarras. Una petición política para la que no han dudado en utilizar como ejemplo la imagen de una menor que para ver a su padre o madre presos por pertenecer a ETA tiene que salir de su comunidad. Para AEGC este video es un claro ejemplo de la bajeza moral del entorno etarra y el Defensor del Pueblo, que entre sus cometidos tiene el velar por los derechos de los menores, debería estudiar si con el se han vulnerado los derechos de una menor.
Pero independientemente de este hecho desde AEGC queremos recordar a los autores de este video que los padres de esos niños que utilizan para remover las conciencias de nuestros políticos y de la sociedad no están en prisión por robar una gallina. Están privados de libertad por asesinar a otros padres y privar a otros niños del derecho a vivir y disfrutar de la compañía de su progenitor. Porque mientras la niña de la mochila después de hacer unos cientos de kilómetros puede abrazar y besar a su padre o madre, centenares de hijos de guardias civiles lo único que pueden besar es una lápida fría de mármol.
En AEGC lamentamos que esos niños tengan que pagar por las culpas de sus padres, claro que pude resultar injusto. Pero más injusto ha sido el asesinato, perpetrado por alguno de esos padres a los que van a ver a prisión, de 23 menores, muchos de ellos hijos de integrantes de las FCSE cuyo único delito fue ser hijo de guardia civil o policía nacional.
Desde AEGC volvemos a insistir en que no puede haber concesiones porque ni se ha pedido perdón a las víctimas, ni se ha anunciado la disolución de la banda terrorista. Lo que recientemente nos han anunciado de entrega del arsenal no es, aunque pretendan venderlo como tal, una muestra de sus “buenas intenciones”. Que empiecen por hacer justicia con esos cientos de niños su infancia y juventud por asesinar a sus padres, que colaboren con la justicia para que se esclarezcan los más de 300 crímenes sin resolver y por supuesto que respeten los derechos de los menores y no se sirvan políticamente de ellos para saltarse la ley.