Nada de lo que crees saber es verdad, ni siquiera la ciencia lo es, pues ésta aún cree, que la tierra redonda es. Nada puede ser verdad, porque la Tierra, donde tú vives ahora, es una escuela a donde se viene aprender a caminar. Por tanto, la verdad que crees tener, no es del todo cierta, aunque ésto, a muchos les duela saber.¿Cómo va a ser verdad, todas la chorradas que por las noticias nos dan? Por dar un ejemplo, el terrorismo no es tal y como te hacen creer que es, el terrorismo es un negocio con el que muchos pierden, pero otros pocos, ganan mucho más, de lo que te puedas imaginar. El terrorismo es un mentiroso, al que le gusta meter miedo en el cuerpo a los demás y así, él poderte dominar. El terrorismo se disfraza de bueno, y señala a otras culturas, a otros países, a otras religiones, como responsables de su maldad, y todo porque el auténtico terrorismo, necesita engañar, para con petróleo saciar su cruel sed, que parece nunca sedienta estar. ¡Terrorismo, el plumero se te empieza a ver ya! Cuántos ejemplos, en el blog de hoy, les podría dar. Pero, ¿Para qué liarlos con ejemplos? Si es que la verdad con poco va. Creo que va siendo hora, de que el hombre entienda que somos como niños jugando a ver quien puede más. Las guerras mundiales que la humanidad ha vivido, a pesar de sus terribles consecuencias, no han sido más que piques infantiles entre países, con una sola pretensión: Ser el más grande, el más que puede, el más que tiene, el MÁS. Únicamente, para aparentar y para decir que el mundo le pertenece; que es suyo y de nadie más. Mientras, el Supremo se parte de risa escuchándonos las bobadas, que no paramos de inventar. ¿Superior a qué? Si somos piojitos, viviendo en una tierra que flota en el mar, un mar que rodea un planeta que se llama Tierra, y que de tierra poco va a quedar, como sigamos queriendo conquistar, algo que no es tuyo, ni mío, sino de todos y de nadie más, porque, éste es un lugar al que venimos a pasar un ratito, para luego regresar a nuestro hogar. Por cierto, ¿Han visto la película; “Nuestro hogar” Se las recomiendo. (Perdonen el giro tan radical que les acabo de dar, les devuelvo al blog, y espero que no se hayan mareado, con la frenada que les acabo de dar) Lo que les decía, ¿De qué le vale a un país, ser potencial mundial? Pues está muy claro, para poder controlar. A mi, que me encanta soñar, siempre sueño en un mundo donde haya unidad. No me refiero a la unidad de las matemáticas, sino a esa unidad de la que Macaco, el cantante Español, ha creado una canción, y quién con su “Do, re mi, fa , sol” le ha dicho a la gente, muy sutilmente, que hay una ley suprema que se llama; La ley del uno, y a la que además, el interprete te invita a pasar, a unirte, a ser uno más. ¿Ya te sumastes ya? Pues no esperes más, porque con esta ley entenderás, que las etiquetas culturales son muy perjudiciales, más incluso que el azúcar que a tus hijos les das para merendar. Pongamos otro ejemplo, uno con el que yo me he pasado muchas horas meditando, para saber quien tiene la verdad. Hittler o los Judíos, Los Judíos o Hittler. Menuda responsabilidad escribir estos dos nombre juntos, en este blog, sin que me ponga a temblar. He estado mucho tiempo leyendo, leyendo y releyendo, sobre este asunto, del que me cuesta encontrar el auténtico principio y el auténtico final.. y al final, al final, al final… Al final, el mismo Final me ha puesto un asiento de piedra al lado de Sócrates, menudo honor el mío, con un fin, hacerme entender, que yo como él filósofo, tampoco sé na´ Muchos creen que Hittler es un criminal, y otros lo creen de los Judíos, y en medio de tanto lío, me encuentro yo escribiendo mi propia verdad, que no digo que sea la gran verdad. Ni los Alemanes, ni los Judíos son malos, Sería un error por parte de la humanidad juzgar sin más, alguno de ellos, sin haberte puesto primero a investigar. He escuchado cosas horribles sobre los Judíos, y he leído barbaridades sobre los Nazis, de la misma forma que escuchado e investigado cual es la verdad que hay detrás de cada uno de ellos. Reconozco que aún me falta mucho por aprender pero, al menos tengo mi primera y pequeña idea, sobre este conflicto que es tan difícil de entender. En mi opinión, tanto Alemanes como Judíos, aunque en idiomas distintos, están hablando de lo mismo; La humanidad y su despertar. Yo no quiero entrar en la polémica que hay detrás de este asunto. No por cobarde, sino porque necesito indagar más sobre algo que sucedió en un pasado, del que yo siento que aún me falta por aprender mucho más. Me sabe amargo decir que los Judíos fueron malos, por las razones que se suelen dar, como también me pasa con el Alemán. Aún, no me atrevo a subirme a la balanza para juzgar, y señalar quien es el bien o quien es el mal, eso mejor se lo dejo a Pallas Atena, que es la que mejor sabe juzgar, porque todavía necesito dialogar más sobre esta verdad. Lo que yo quiero hacerles entender es que el ser humano, debe aprender a escuchar y buscar toda la verdad, antes de hablar, de posicionarse o de juzgar. Para defender mi idea sobre este asunto, he decidido hacerlo a través de unos símbolos y así, pienso me puedan todos ustedes entender. El primer símbolo del que he decidido hablar es el de Hittler. Su saludo, donde una mano que va estirada hacia el frente y ligeramente inclinada hacia arriba, como si quiera señalar algo que está por encima de su vista, mientras que la otra pegada al pecho va. Es un gesto, que seguro todos conocerán, un gesto que tiene un significado más espiritual que militar. Hasta hace poco, cada vez que veía el saludo nazi por los medios de comunicación, los pelos se me ponían de punta, me horrorizaba aquel guiño, y todo era a consecuencia de una mala interpretación, que el hombre le ha dado a este saludo, que hacía un señor junto a su nación. Un señor, y me refiero a Hittler, que descubrió una verdad espiritual, y que por sus miedos y complejos confundió, manipuló y mal uso. Este gesto del que les hablo, no era de Hittler, él sólo lo descubrió. El saludo de Hittler está en todos lados, párate a observar; Los alumnos cuando tienen dudas en clase, y quieren preguntar a su profesora, levantan la mano como Hittler. Los deportistas cuando ganan alguna copa o medalla, levantan su mano de la misma forma que lo hacía Hittler. En la política, se suele también usar este saludo, sobre todo al final de los meetings. Cualquier sacerdote cristiano también hace ese gesto al saludar a sus fieles, e incluso Cesar, el padre de Augusto, quien trajo 200 años de Pax al imperio romano, también saludaba de la misma forma que el alemán. Y se fijan bien, hasta los indios americanos saludan como cualquier otro ciudadano, que ante un juicio promete que va a decir la verdad y toda la verdad. Todos estos saludos son el mismo saludo, y aunque se usan en contextos distintos, están expresando la misma verdad espiritual. Lo mismo ocurre, con el símbolo de los Judios, de la estrella de David, La mala interpretación del símbolo ha llevado a la ruina a la especie humana, pues este símbolo del que he leído que fue usado por otros pueblos como mandalas, otro psicograma de la superación de la dualidad, como un Yin-Yang del tao, la unión de los opuestos, la unión del cielo con la tierra, la encarnación terrenal de la divinidad ,nada de malo tiene, ni tendrá ¿Se han dado cuenta? Todo se puede mal interpretar, pero afortunadamente es tu luz interior, la que te ayudará a comprender que no hay nada bueno, ni malo ni en el judío, ni en el alemán, pues todo lo que tus ojos ven, es un fiel reflejo de tu forma de pensar. Dos personas, una situación y tropecientas formas de interpretación. Pero esto ocurre con todo. Fíjate que cuando morimos, algunas culturas ponen flores cuando van a visitar a la persona que han perdido. Otra en cambio, ponen piedras en su lugar. ¡Cómo si los estuviera viendo! Pues más de uno, seguro se acaba de regañar con la idea de poner piedras, en lugar de un bonito ramo de flores, que con los días se marchitará. ¡A ver! Las dos opciones están bien, es más hay otras culturas que ponen otras cosas diferentes a las flores o piedras, cuando a sus difuntos van a visitar ¿Y qué más da lo que pongan? A ver, los que ponen flores las ponen por una razón y los que ponen las piedras les pasará igual, tendrán su propia interpretación. La razón de porque los judíos ponen piedras sobre las tumbas de sus difuntos, tiene mucho sentido. La piedra para ellos, tiene la particularidad ser una creación antigua y de vida muy larga, con un mensaje implícito; la eternidad y los judíos sobre la muerte piensan igual. Éstos creen que el alma por ser eterna sigue existiendo, y lo único que se fue es el cuerpo. La flor, en cambio tiene corta vida y rápidamente se marchita, igual que el cuerpo que murió. Me atrevo a decir, que los cristianos con la flor dicen adiós al cuerpo, y los judíos con la piedra, dicen adiós al ser que se marchó. Da igual como te expreses al decir adiós, con una piedra o con flor, lo importante es que te despides de alguien que seguro estará con Dios. Todos hemos perdido a alguien, y alguien nos perderá a nosotros alguna vez, esta es una ley que debemos aprender, pero aprenderla sin dolor y sin temor es como lo debemos hacer.
Johanna Pérez Hernández