Resumir la trayectoria vital de una personalidad como la de D. Manuel Lezcano González es sin duda un atrevimiento.
Sus iniciativas para la mejoras sociales y ambientales de todos los barrios del distrito de Tafira son algunas de sus tareas más recordadas.
A su 90 años, Manuel Lezcano sigue vistiendo la bata de médico y atendiendo mañana y tarde a los vecinos de Tafira en su consulta, que también es su casa.
Es una persona avanzada que mira a la cara mientras escucha y habla generando una interlocución respetuosa y efectiva. Sus palabras, silencios y miradas siempre sabias, se convierten en el mejor estímulo para cuantos se suman a la ardua y a veces incomprendida labor de reivindicación, trabajo y aportación social altruista.
Para todos los miembros de la Asociación para la defensa del árbol y del Paisaje de Gran Canaria (ADAPA) es un privilegio vivir la experiencia de ofrecerle a su presidente, Manuel Lezcano, este homenaje en el Real Club Náutico de Gran Canaria. Presidente de honor y fundador de este colectivo que está influyendo de forma cualitativa en la mejora del paisaje de Gran Canaria.
En el año 2006 ya el Cabildo Insular le nombró Hijo Predilecto de Gran Canaria.
Su trayectoria vital está volcada en los demás a través de la práctica de la medicina y de la política activa.
La entrega de su padre en el Hogar Familiar de Tafira como médico marcaría no sólo el lugar de su nacimiento sino su vocación, a la que ha dedicado parte de su actividad laboral desarrollada en el área de Las Palmas de Gran Canaria y Santa Brígida.
Sensible a las necesidades de los demás y con natural predisposición a prestar servicios a las personas, esta aptitud le llevó a trabajar por la población desde sus cargos como Concejal del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y Alcalde de Santa Brígida. Ocupaciones que se complementaron a la perfección con la prestación de servicios asistenciales a los más necesitados como médico en la Obra Sindical 18 de Julio, y su destacado paso por la Caja Insular de Ahorros de Canarias como Presidente del Consejo de Administración, donde impulsó notablemente su Obra Social.
Su perfil humano tiene parcelas que alcanzan el ámbito de la cultura y la movilización social en busca del crecimiento personal de cuantos se han sumado a sus múltiples proyectos culturales.
Los beneficios de su empeño por dinamizar la vida cultural y su tesón por mantener las características paisajísticas de su zona de referencia en la isla permanecen en la memoria de sus vecinos, y el mérito a su entrega humana se le reconoció hoy en este acto.
¡Felicidades Don Manuel y gracias por tanto bueno!