CARTA ABIERTA A D. PABLO IGLESIAS TURRIÓN

Sr. Secretario General de Podemos.

El motivo de esta carta es su declaración, y la de miembros de su partido, publicada el 17 de octubre de 2017 en varios medios de comunicación, sobre la existencia de “presos políticos” en España.

En estas declaraciones, y siempre según los diferentes medios de comunicación, su partido asegura que los líderes de la ANC, Jordi Sánchez, y de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, son “presos políticos” y han exigido su inmediata puesta en libertad.

Su portavoz en el Congreso, Irene Montero, ha dicho que: ” Es una auténtica vergüenza que existan presos políticos en el siglo XXI”.

Quisiera comenzar diciéndole que yo soy uno de los muchos millones de españoles que estuvieron, están y estarán indignados con la actuación de muchos políticos (ya sean hombres o mujeres) con respecto a la corrupción que existe en muchos ámbitos de nuestro país.

Ese hartazgo general tuvo su máxima expresión en las manifestaciones conocidas como del 15 de mayo de 2011. De ahí surgió un deseo generalizado entre la ciudadanía de un cambio político que nos permitiera mejorar el control sobre la actuación política y volver a creer en ella. Todo ello acompañado de un poder realmente extraordinario: el de la Justicia.

Desde luego muchos nos sentimos defraudados con la actuación que su partido político ha hecho con respecto a las ilusiones que tuvimos en nuestro país de un “cambio real”. No solo eran ustedes los que representaban ese cambio y esa indignación, también estaban en la misma línea de indignación UPyD y Ciudadanos, si bien fueron ustedes los que intentaron capitalizar ese movimiento. Afortunadamente mucha gente ha dejado ya de asociar “indignados” con “Podemos”. Muchos indignados creemos más en la España de futuro que en la del odio y rencores pasados, que parece, por sus continuas declaraciones, que ustedes quieren reflejar.

Yendo al comienzo de la carta, me gustaría decirle que sería de risa sus manifestaciones poniendo en duda la Justicia en España sino fuera porque usted pudo haber formado gobierno en España en el caso de haber sido investido como presidente de gobierno el Secretario General del PSOE D. Pedro Sánchez Castejón el día 4 de marzo de 2016.

La “composición de parte del nuevo gobierno” la conocimos por usted mientras el Sr. Sánchez estaba todavía reunido con S.M. el Rey. En eso si que son hábiles, los ministerios que querían eran sin duda “con muchas competencias”, sobre todo en materia de justicia, seguridad interior, inteligencia y defensa.

Me gustaría recordarle, pues podría haberlo olvidado, que España es un país democrático, de pleno derecho, desde hace ya casi 40 años. Ya no vale hablar de la “joven democracia española”, España es una democracia y gracias a ella usted es uno de nuestros legisladores en el Congreso de los Diputados. Poner en duda esa realidad sería poner en duda su propia capacidad para entender algo tan simple.

Yo también tuve un abuelo muerto por parte de las fuerzas rebeldes en la guerra civil española, pero no por ello mantengo, como parece hacer usted, vivo el odio hacia lo que en aquella época ocurrió. Es una parte horrible de la historia que tenemos que recordar para que no vuelva a suceder, pero no recrearnos en la misma. Todos tenemos nuestras propias víctimas.

Sr. Iglesias, en España tuvimos una guerra civil entre españoles, una dictadura de Franco y lo que se podría también denominar “un franquismo”.

No creo que usted desconozca que la guerra acabó el 1 de abril de 1939, que Franco murió el 20 de noviembre de 1975 y que el franquismo desapareció poco después, desde el momento que la democracia se iba afianzando y desaparecían los “viejos elefantes franquistas”.

En este punto me gustaría pedirle, si tiene a bien responderme, que me aclarara lo siguiente:

1º.- ¿Qué interés tiene usted en mantener la guerra civil todavía viva entre los españoles que ya nada tenemos que ver con ella?. ¿Eso le da votos?. Le recuerdo que atrocidades, dentro de la guerra, hubo por ambas partes, y eso fue producto del odio.

Si asociamos, como mayores exponentes, el fascismo con Hitler y el comunismo con Stalin, ¿No es cierto que tanto el uno como el otro fueron responsables de la muerte de millones de personas?.

¿No es tan deplorable ver fascistas cantando el “cara el sol” con la mano en alto y la bandera española con el águila de San Juan, que ver a comunistas con el puño en alto, cantando “la internacional” y ondeando la bandera republicana?. ¿Es que los muertos por el fascismo son horribles y los de los comunistas no?.

Eso es envolverse en las ideas de recordar el comunismo dentro de un “falso romanticismo” y sin querer reconocer que ambos, fascismo y comunismo, son regímenes totalitarios y por tanto, totalmente rechazables dentro de la democracia.

2º.- ¿Qué interés tienen en mantener la memoria del dictador?. Tan solo la extrema derecha y la extrema izquierda quieren mantenerle vivo en el recuerdo de nuestro país. ¿Es que ambos extremos de retroalimentan?.

Atentan contra la más mínima inteligencia cuando consiguen, con relativo éxito, asociar fascismo o franquismo con la bandera de España. Bueno, ya sabemos como se afecta a la inteligencia de la gente cuando se les “adoctrina”.

3º.- ¿Es la derecha española diferente a otros partidos conservadores de Europa?. ¿Porqué quieren asociarlos continuamente con Franco y el franquismo?.

Pues en mi opinión porque les interesa seguir manteniendo vivo el odio hacia algo que ya ocurrió hace mucho tiempo. Eso les da votos, lo saben y, hábilmente, lo explotan.

En resumen Sr. Iglesias, no, rotundamente no. En España no hay presos políticos. En España hay gente, como usted, que solo cree en las leyes que les beneficia y descartan las que no les interesan poniendo en duda la labor de las personas que se dedican a impartir justicia. ¿Eso se puede llamar “ser demócrata”?.

Las leyes son la expresión máxima del Estado de Derecho y de la democracia, a mi hay leyes que no me gustan, es obvio, las leyes no pueden ser al gusto de cada uno de los 47 millones de españoles pero una vez que son leyes, se asumen y se acatan. Le aconsejo Sr. Iglesias, como demócrata, que así lo acepte y si no esta de acuerdo con algunas leyes, usted, que es legislador, intente cambiarlas. Eso si, busque las mayorías que parece le faltan para poder hacerlo, ya que si no la tienen, será por la voluntad mayoritaria de la ciudadanía española en no otorgársela.

No se deje llevar por el afán egoísta de obtener votos solo a base de decir a los ciudadanos de a pie lo que ellos quieren oír, hábleles de realidades, de cosas que se puedan cumplir, el resto es simplemente “populismo barato” e impropio de una persona que cree realmente en servir a los intereses generales de la ciudadanía española porque a veces, ese deseo se puede confundir fácilmente con “hipocresía”.

Mi intención al escribirle esta carta es manifestarle mi respeto por la democracia, por el Estado de Derecho, por la libertad de expresión (cosa que ejerzo con esta carta), y como repulsa por poner en duda, usted y su partido, algo en lo que creo firmemente: en las personas que en este país trabajan por y para la JUSTICIA.

No Sr. Iglesias: ¡NO TENEMOS PRESOS POLÍTICOS!.

Diego Gutiérrez de Ávila

Colaborador de Radio Faro Canarias y Digitalfarocanarias.com