- La actuación beneficiará a más de 3.000 habitantes de casi 1.300 hogares
- Una parte de la red será remozada y otra se instalará nueva
El Cabildo de Gran Canaria destina casi 500.000 euros a la renovación y ampliación del saneamiento de varios núcleos poblacionales y barrancos de Moya, un proyecto financiado por la Institución insular a través de Plan de Cooperación con los Ayuntamientos, informó el consejero de Cooperación Institucional, Carmelo Ramírez.
El Ayuntamiento de Moya ha redactado el proyecto y se encarga del procedimiento para su adjudicación, de modo que la previsión es que las obras comiencen este mes de enero. Los técnicos de la corporación municipal serán los encargados de realizar el seguimiento de las obras.
La mejora en la infraestructura y la colocación de la nueva red beneficiará a más de 3.000 habitantes distribuidos en casi 1.300 viviendas ubicadas en el núcleo urbano de Moya y en los barrios de El Lance, El Palo, Carretería, Vínculo de Solís y Camino de San Fernando, de modo que se trata de una actuación de gran relevancia para el municipio, subrayó Ramírez.
Las tuberías, tanto las renovadas como los tramos nuevos, canalizarán aguas residuales hasta la estación de bombeo ubicada en el Barranco de Las Ñocas, que a su vez las enviará para su tratamiento a la depuradora de Cabo Verde.
La sustitución de la red de saneamiento del Barranco de Las Ñocas tiene como objetivo subsanar las deficiencias que presentan las actuales tuberías y preparar la acometida necesaria para soportar un mayor caudal de agua previsto por el crecimiento poblacional de los núcleos cercanos.
Además, la colocación de una nueva red busca dar servicio a futuros núcleos rurales como las áreas de San Fernando y Zarza Gorda, ubicadas en el Parque Natural de Doramas.
Distribución por tramos
Así, la actuación contempla la colocación de casi dos kilómetros y medio de tuberías distribuidas en diversos tramos en los que el diámetro de la infraestructura varía en función de la población a la que beneficia.
La tubería que discurre por el Barranco de Pajarito, que recoge aguas residuales del casco urbano y de los barrios de Vínculos de Solís y Carretería, será sustituida por una nueva conducción de mayor diámetro.
Otro de los tramos es el que comienza en la Avenida del Cabildo y discurre por el Barranco de Las Ñocas, que alcanzará un diámetro de 50 centímetros a lo largo de 1.300 metros de longitud, colocados bajo la carretera GC-75.
El siguiente segmento tendrá una tubería de 40 centímetros durante 450 metros lineales hasta la zona de ocio de La Fragata, lugar en el que comenzará otro tramo con un ancho de 31,5 centímetros y dará servicio a las futuras zonas rurales de San Fernando y Zarza Gorda en el Parque Natural de Doramas, además de las viviendas del Camino de San Fernando.