El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, insistió hoy en que no se opone a que las empresas y las industrias usen gas en sus instalaciones, pero no a costa de desplegar una red de aire propanado que hipoteque al resto de la sociedad y a la entrada de las energías renovables, pues tal como han manifestado diversidad de organismos internacionales, son un freno y el camino es apostar por lo más vanguardista, las energías limpias, y no por tecnología de hace treinta años.
“No me opongo como ha dicho un periódico que nació para defender a la provincia Las Palmas y ahora defiende los intereses de ATI-CC”, pronunció Morales, de hecho, “son libres de apostar por el gas en vez de por un combustible menos peligroso como la biomasa, que supone importantes ahorros como en el Hotel Cordial, que ha dejado de gastar 114.000 euros al año”.
“Cada uno es libre de usar lo que considere, pero distinto es que aceptemos que se transforme el modelo de las ciudades con respecto al consumo de energía”, ahondó Morales, quien recordó que entidades como el la Unión de Banco Suizos, el Banco Mundial y otros muchos han retirado sus inversiones y apuestas por los fósiles en todas sus formas y manifestado su respaldo a las renovables.
Por ello, “respetando la independencia de cada medio, los criterios son absolutamente respetable, esa es una cosa, y otra que aceptemos la manipulación”, aseveró Morales acerca de la publicación que asegura que se opone a que las industrias usen gas, pues a lo que se opone es a que ello sea a través de una red de aire propanado, algo que en cualquier caso ha reiterado en diversidad de ocasiones.
Asimismo, planteó sus dudas acerca de que las industrias apuesten por este combustible, pues ya son dos los polígonos industriales, Arinaga y El Goro, los que se han manifestado en contra.
La propia Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia emitió en un informe en el que subrayó que las regasificadoras, cuya antesala es el gas ciudad, no cuenta en Canarias con justificación, no tiene un estudio económico que lo avale ni clientes, pues la propia Endesa no se compromete a adquirir ese combustible para sus plantas cuando ya es más barato la eólica e incluso la fotovoltáica.
Por otra parte, “lo que venden como un combustible más barato pero no es así”, está regulado y muy subvencionado, tanto es así que el déficit el pasado año fue de 120 millones de euros. “Ese supuesto 30 por ciento de ahorro es incierto, primero porque tienen que amortizar la inversión inicial de 2.000 a 5.000 euros y segundo porque no puede ser que permanezcan las retribuciones como está cargando el déficit al resto”.
Tampoco es cierto que sea un combustible más limpio. Lo es cuando se quema, pero no en el proceso de obtención y producción, que es altamente contaminante y puede ser hasta un 80 por ciento más potenciador del calentamiento global. “Con esto se vierten muchísimas mentiras, cada uno su versión, pero básicamente se trata de una inversión multimillonaria que paralizará la penetración de las renovables y lo tendremos que pagar todos los españoles como las autopistas”, aseveró.
Otra tergiversación es que tenga al 80 por ciento de los españoles como clientes. Las redes llegan al 80 por ciento de las poblaciones, pero solo lo consumen un 27 por ciento, concluyó Morales, quien explicó que la central hidroeléctrica Chira-Soria va a buen ritmo y confió en que las obras empiecen en 2019 con la desaladora que suministrará agua en casos de sequía a la central, pero a la población, un proceso “que va por buen camino”.
Asimismo, recordó que este proyecto casi se pierde, pero que el Cabildo lo recuperó con el nuevo mandato para apoyar la entrada de las energías renovables, un modelo único por sus características en España y que otras islas como Tenerife se plantean reproducir. “Ese es el camino”, celebró Morales.