Los servicios jurídicos de AEGC logran la anulación de la sanción de un año de empleo y sueldo por una falta muy grave a un agente de la Guardia Civil destinado en la Comandancia de Murcia.
La Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC), Asociación que engloba todas las Escalas y Empleos de la Guardia Civil, por medio del presente comunicado pone en conocimiento de la opinión pública en general lo siguiente:
Un año de empleo y sueldo por una falta muy grave era la “condena” que la Guardia Civil había impuesto a un agente destinado en la Comandancia de Murcia y que Andres Silvente Gonzalez, abogado de AEGC ha conseguido que el Ministerio de Defensa anule finalizando el procedimiento SIN RESPONSABILIDAD para el compañero. Se trataba de la segunda sanción más dura que la Guardia Civil puede imponer a un agente solo superada por la expulsión del Cuerpo.
Este recurso ganado por nuestra asociación viene a poner en evidencia en primer lugar el abuso que por parte de la Guardia Civil se hace del Régimen Disciplinario y, en segundo lugar, el atropello a los derechos como ciudadanos de los miembros de la Benemérita a los que se obliga a cumplir la sanción a pesar de estar aún recurrida en los tribunales. Porque, como ocurre con todos los guardias sancionados, a este agente, al que se le notificó el año de suspensión este último febrero, lleva ya seis meses sufriendo las consecuencias no sólo económicas sino que además ha sufrido la pérdida de destino y además se le ha comunicado también la pérdida del pabellón. Es decir, que sin que se hubiera resuelto el recurso de alzada él y su familia llevan siete meses soportando una sanción que ahora ha sido declarada NULA, con el agravante de que después de conocer la NULIDAD del expediente, la Dirección General de la Guardia Civil, vía Hacienda, ahora reclama al compañero, incluidos intereses de demora, la parte del sueldo correspondiente a los meses de febrero y marzo.
El agente, que se encontraba además de baja psicológica en el momento de los hechos, fue expedientado al considerar la Guardia Civil que estaba ejerciendo de abogado sin tener la compatibilidad por encontrarse en el despacho de su abogado cuando se llevaba a cabo una inspección de trabajo, que por cierto no vio ninguna acción punible ni por parte del bufete ni por el agente. Pero es que además las dos acusaciones en las que se ha sustentado la sanción han quedado demostradas del todo falsas, como ha reconocido la resolución dictada ya que ni estaba ejerciendo la abogacía y si tenía reconocida por sentencia del 2017 la compatibilidad para ejercer como abogado, estando además dado de alta en el Colegio de Abogados.
Lo que le ha ocurrido a nuestro compañero no es un caso aislado dentro de la Guardia Civil, por eso desde AEGC venimos solicitando que deje de aplicarse el actual Régimen Disciplinario por injusto y desmedido, además de no ajustarse a derecho ya que aplica las sanciones sin que haya finalizado la vía administrativa. Un Régimen Disciplinario que nos deja indefensos a los guardias civiles y que se está utilizando como método de mando. Pero en la Asociación también nos preguntamos quién va a resarcir moralmente al compañero quien encontrándose de baja psicológica ha tenido que soportar este estrés emocional todos estos meses, ¿cómo se cuantifica este daño moral causado al compañero y a su familia?¿quién va a responder en la Guardia Civil de este despropósito que decidió expedientar a un funcionario viendo un “delito” donde la misma Inspección de Trabajo no había visto nada?.
Para la Asociación Española de Guardias Civiles esta resolución debería llevar al nuevo Director General, juez e hijo de guardia civil, a plantearse la necesidad de cambiar este Régimen Disciplinario que ya nació rancio y obsoleto para aplicarse a una policía del siglo XXI que con su profesionalidad ha dado y da muestras de su profesionalidad día a día.