El vicepresidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT), Tom Smulders, ha dado por finalizada, hoy día 26 de marzo, la operación “salida” de los turistas que estaban alojados en la isla de Gran Canaria tras la declaración del estado de alarma por el coronavirus y la obligación posterior del cierre de establecimientos turísticos.
Esta gestión se ha realizado en tiempo y forma, de manera escalonada y ordenada, de manera que los cerca de 100.000 turistas que estaban en los establecimientos turísticos legales de la isla han regresado a sus países cumpliendo las medidas de seguridad y control.
Como ha señalado, el también presidente de la Asociación de Empresarios de Alojamientos Turísticos (AEAT) y presidente de la Comisión de Turismo y Seguridad, desde que se declaró la necesidad de que los turistas efectuarían su salida del territorio canario, en Gran Canaria se canalizó el trabajo en la patronal, encargada de gestionar la repatriación a través de la Comisión de turismo y Seguridad de la FEHT.
Para esta gestión se dividió a los pasajeros y turistas en Gran Canaria, que tenía una ocupación media del 70% con cerca de 100.000 personas, en cuatro grupos.
El primero de los grupos lo conformaron turistas con paquete de viaje a través del turoperador, con alojamiento y vuelo de ida y vuelta concertado, que representaban el 60% del total, 60.000 personas.
El grupo 2 lo formaron personas que habían reservado por gestión propia el alojamiento y el vuelo a través, por ejemplo, de plataformas virtuales, con fecha concertada.
El grupo 3 estuvo formado por personas que tenían establecido su viaje con estancia de larga duración, sin fijar ni tener billete para el vuelo de regreso.
Y el grupo 4 incluyó a personas que por razones de salud no podían moverse en la fecha prevista a su país de origen, no necesariamente por problemas de coronavirus sino también por otros problemas de tipo cardiaco o fracturas, entre otros.
Para la distribución de estos grupos se crearon grupos de contacto y de intercomunicación con la comisión de Turismo y Seguridad de la FEHT, que en casos de emergencia se coordina entre sí. Este equipo está formado por el sector turístico de la FEHT, alojamientos y restauradores, turoperadores, y con contacto y coordinación puntual con la dirección del aeropuerto, la vivienda vacacional legal representada por ASCAV, el cuerpo consular de los países europeos de origen de los turistas, el viceconsejero del Gobierno de Canarias, Sergio Moreno, el consejero de Turismo del Cabildo, Carlos Álamo, además con los mandos de la Policía Nacional y Guardia Civil.
Se han celebrado distintas reuniones con Cabildo de Gran Canaria y miembros del Gobierno de Canarias para, desde el inicio, poner en marcha el proceso de retorno por las instrucciones pertinentes dictadas mediante Decreto del gobierno estatal.
Antes de vencer la fecha de hoy, día 26, los turoperadores ya indicaron que los turistas que permanecían en la isla habían terminado su repatriación, en ocasiones con fecha de regreso anterior a la planeada.
Los turistas, más de una vez con lágrimas en los ojos, han tenido que abandonar la isla a pesar de confesar que se sentían más sanos y protegidos en Canarias. Muchos de los turistas afectados eran personas mayores de 60 años que, por disciplina y sentido común, han cumplido con lo que les han encomendado.
La comisión ha tenido momentos clave cuando empezó a moverse el grupo 2, personas que tenían que regresar a su país con vuelo concertado, cancelado sin alternativas aplicables como ha ocurrido en los casos de Ryanair. Aquellas personas como el caso del grupo 3 que no tenían vuelo de regreso, han sido pasajeros que han buscado alternativas con los vuelos que quedaban con disponibilidad de compra o cambio, aplicándose a veces un abuso improcedente de subida de tarifas, que multiplicaron en ocasiones hasta cinco veces el precio inicial.
Por otro lado, los países de origen han gestionado ayudas mediante sus embajadas y cónsules presentes en las islas, que han actuado de forma modélica y profesional para repatriar a las personas que corrieran riesgo de quedar sin vuelo de regreso .
Para ello, enviaron vuelos con plazas disponibles únicamente para el regreso, que han sido vuelos de repatriación oficial organizados por el Estado de origen. En estos vuelos, en los que el pasajero sabía que no pagaba previamente sino se establecía un sistema de firma de un reconocimiento de deuda de 250 euros para el pago posterior del billete, se ha dado la situación de dobles reservas y, por tanto, aviones con plazas vacías innecesariamente.
En estos momentos están todos los hoteles y alojamientos turísticos legales cerrados y sin huéspedes y solo quedan algunos complejos pequeños donde se alojan clientes con fecha de regreso posterior, incluso algunos a finales de abril o mediados de mayo.
Por otro lado, han quedado a disposición del gobierno dos hoteles en Gran Canaria, en Mogán, Anfi Emerald y de la cadena Cordial, el Vista Acuario, para emergencia en el ámbito definido por el decreto estatal. Como ha señalado la patronal, preocupa cómo definir y canalizar bien la oferta de alojamiento, para cubrir necesidades de alojamiento del personal sanitario o cuerpos de seguridad, que necesitan un lugar de descanso como han pedido por distintos medios.
En este momento, los problemas humanos aislados que quedan por resolver por procesos burocráticos, van a llegar a una solución digna y humanitaria, si del sector dependiese.
Aparte de todo ello, en el suelo turístico quedan los complejos turísticos de uso mixto donde según el empadronamiento de San Bartolomé de Tirajana hay 12.000 residentes de todas las nacionalidades. Se desconoce cuántos de esos residentes se han marchado a su país de origen. Este es un tema a tener en cuenta para la futura gestión de la zona, ya que dan cobijo de forma legal o menos legal a una gran cantidad de personas que han optado por quedarse en su vivienda, aunque esta esté en un complejo de uso turístico según su tipificación.
Dentro de la patronal se trabaja con el concejal de Turismo de San Bartolomé de Tirajana, Alejandro Marichal, el consejero insular de Turismo, Carlos Álamo, y del Gobierno de Canarias, Sergio Moreno, para hacer una reflexión y que después de la inactividad de indefinida duración del sector tener suficientes aceleradores, eventos y actividades que podrán reactivar el proceso turístico en la isla.
Entre las opciones se plantean actividades como el Carnaval de verano, el Orgullo Gay, entre otros eventos.
Este periodo de inactividad va a ser el varapalo más fuerte e inesperado que se ha conocido en la historia turística de la isla, y va a tener consecuencias en lo humano, de forma directa o indirecta para la economía en sí y para los empresarios, ha recalcado Smulders.
En el tiempo de espera pueden caer empresas y por tanto provocar desempleo, por lo que se está trabajando para llevar a cabo trabajos necesarios de mantenimiento, reparación, etcétera y gestionar ERTEs que garanticen los puestos de trabajo.
El destino, como ha recordado Smulders, cuenta con una oferta turística que es inigualable por su diferenciación y su calidad, y que va a levantarse con el esfuerzo y la unión de todo el sector y sus colaboradores y esperemos de las autoridades competentes.
Del mismo modo, la patronal ha querido agradecer el trabajo y el trato de todas las personas de la isla que siguen en su puesto de trabajo a pesar de la situación, atendiendo a compradores, ciudadanos y turistas siempre con una sonrisa, así como a los sanitarios, para los que no hay palabras de agradecimiento suficientes que sirvan para valorar el inmenso esfuerzo y trabajo que están realizando por la salud de todos.