Por su seguridad, los taxistas que formen parte o convivan con alguna persona que forme parte de algún grupo de riesgo del COVID-19, podrán cesar su actividad profesional.
— Los vehículos deberán extremar las medidas de prevención e higiene y solo podrán transportar a un único pasajero, salvo casos excepcionales.
El Ayuntamiento de Agüimes ha aprobado un nuevo decreto regulador del transporte público en el municipio por el que se reducirán en un 80% los servicios de taxis. Durante la vigencia durante el tiempo de duración del actual Estado de Alarma, solo se permitirá la circulación a una de cada cinco licencias existentes. Además, de acuerdo a las normas impuestas por las autoridades sanitarias para frenar la propagación del coronavirus COVID-19, solo se autorizará a un pasajero por taxi, salvo casos excepcionales debidamente justificados, como el acompañamiento a menores, personas con discapacidad o personas mayores con movilidad reducida.
La reducción del servicio se acompañará con la posibilidad de cese de actividad para aquellos titulares de licencias de taxis que se encuentren (o convivan con alguien que se encuentre) en alguno de los grupos de personas con mayor riesgo de verse afectados por el COVID-19, personas mayores de 65 años, enfermos crónicos de pulmón, corazón, enfermedades renales, hepáticas, inmuno depresivas, metabólicas o sanguíneas. Por su seguridad, podrán dejar de operar, previa solicitud y justificación por escrito.
Las medidas incluidas en el decreto municipal han contado con la opinión favorable del propio sector del taxi. Los profesionales afectados podrán acceder a las ayudas del Estado para pymes y autónomos por reducción de ingresos por debajo del 75% o al subsidio por desempleo en caso de ser asalariados, a través de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).
La cooperación entre los representantes del sector y el Ayuntamiento es permanente desde que el pasado 14 de marzo el Gobierno decretara la declaración del Estado de Alarma por la crisis sanitaria del coronavirus. Pese a la reducción establecida, la continuidad de los taxis en servicios mínimos garantizará el uso de este modo de transporte público para el acceso de la ciudadanía a los servicios básicos como la provisión de alimentos, las farmacias o los centros de salud.