Los JNC se reúnen con los estudiantes de la ULL y ULPGC y demandan “soluciones excepcionales” para los problemas que se afronta este fin de curso, Los Jóvenes Nacionalistas de Canarias mantienen un encuentro de trabajo con los consejos estudiantiles de ambas universidades La brecha digital, el sistema de becas, la educación ‘on line’ y la pérdida de oportunidades centraron el contenido de este encuentro.
Canarias a 6 de mayo de 2020-
Los Jóvenes Nacionalistas de Canarias han mantenido en el día de ayer una reunión con los consejos de estudiantes de las dos universidades públicas canarias durante la que dialogaron acerca de cómo se está gestionando el final de curso en la enseñanza superior en esta situación del estado de alarma. Así, temas como la brecha digital, el acceso a las residencias para recuperar apuntes y libros o la preocupación por el futuro académico, centraron el contenido de un encuentro tras el que los JNC reclaman tanto a las dos universidades como al Gobierno de Canarias que sean capaces de poner en marcha soluciones excepcionales para una situación que también es excepcional.
Para los JNC “el Gobierno de Canarias y las dos universidades” debe dar respuestas reales que “deben adaptarse a las distintas realidades que se encuentran los estudiantes” y no “amenazar” con soluciones “generales” que solo dan solución a un número determinado de alumnos. “Se pide a los estudiantes que se adapten a estas circunstancias pero, sin embargo, ni el Gobierno ni las universidades son capaces de adaptarse a las distintas realidades de los alumnos”.
El secretario general de los JNC, David Toledo, que estuvo acompañado por Jana González, diputada nacionalista, Verónica Meseguer, consejera del Cabildo de Tenerife y secretaria insular de JNC de Tenerife y Bruno Ramírez y Eduardo Álvarez, integrantes de JNC de Lanzarote y Tenerife, respectivamente, valoró junto a los representantes de los consejos estudiantiles de las dos universidades públicas la preocupación por el impacto de la brecha digital que está limitando las oportunidades de muchos alumnos no solo por que durante este confinamiento se encuentren sin herramientas (tabletas, ordenadores) sino por problemas de acceso a internet, sobre todo en isla menores. Toledo destacó que los problemas de acceso a internet “son extremadamente preocupantes para muchos alumnos a los que se va a evaluar en un examen on line” sin las garantías “de acceso a señal o de que esa señal se mantenga durante todo el examen”. Así, los JNC respaldan la petición de los estudiantes de poder acudir a las residencias estudiantiles para recoger material (apuntes y libros principalmente) que necesitan para poder abordar las asignaturas y que tuvieron que dejar allí al inicio del confinamiento. “Un acceso que, coordinado por las universidades, puede tener todas las garantías sanitarias y facilitaría enormemente a muchos alumnos esta etapa final del curso”.
Los jóvenes nacionalistas respaldaron también a los representantes de los consejos estudiantiles en su reclamación de una mayor atención psicológica a los alumnos ante la situación de estrés e inseguridad que genera esta situación; una realidad “que no puede ser ignorada o minusvalorada”.
Así, los JNC coinciden en que existe una preocupación real por el futuro y por la realidad de que muchos de ellos no van a poder afrontar el coste de las matrículas el año que viene debido a las dificultades económicas de las familias y, por ello, “es necesario que se garantice el acceso a la universidad con una rebaja de tasas y se refuerce la formación ‘on line’ que puede suponer la diferencia entre poder o no continuar con estudios universitarios para muchos alumnos”.
En este sentido, los JNC también hacen suya la petición de los Consejos de Estudiantes con respecto al sistema de becas de tal forma que se suspendan los expedientes de devolución de becas que puedan darse en este curso y se modifiquen los requisitos de concesión de becas para el próximo curso. Así, los jóvenes nacionalistas proponen que la caída de la renta familiar sea tenida en cuenta y que los criterios académicos que se ponderen no sean solo los de este año sino que se tenga en cuanta toda la trayectoria en la enseñanza superior.
Precisamente, la situación económica de las familias y cómo afectará esta al alumnado es una de las mayores preocupaciones trasladadas en la reunión sobre todo por cómo afectará al próximo curso en el que, por ejemplo, “en las residencias se pasará de dos alumnos por habitación a uno; lo que sin duda multiplicará el costo del alojamiento”. “Ello tendrá, sin duda”, señaló Toledo, “un mayor impacto para los jóvenes de las islas no capitalinas que corren el riesgo de perder oportunidades”.
Lo mismo ocurre en el caso de estudiantes que compaginaban su tiempo académico con actividades que les permitían afrontar sus gastos y reducir su carga sobre las familias; cuidando menores o dando clases particulares, por ejemplo. “Son actividades que ya no pueden ejercer y que, además, no pueden justificar por lo que es necesario que se establezcan ayudas que permitan a esos jóvenes mantener su matrícula y hacer frente a los gastos del curso”. “La realidad de las becas debe también adaptarse a la realidad impuesta por la pandemia; no puede pretenderse que nada ha cambiado y las universidades deberían activar cuanto antes mecanismos que les garanticen que van a seguir contando con alumnos”.
Finalmente, los JNC rechazaron las exigencias de algunos profesores de mantener videovigilancia durante clases o exámenes on line “una medida que atenta contra la Ley Protección de Datos Personales y garantía de los derechos digitales” por lo que debería haber un pronunciamiento claro en contra por parte de las dos universidades.