— La flexibilización del estado de alarma permite la reactivación de estos sectores económicos, pero con ciertas normas de obligado cumplimiento dirigidas a proteger a trabajadores y clientes ante cualquier riesgo de contagio del coronavirus.
El comercio minorista y la restauración, dos sectores de gran importancia económica en el municipio de Agüimes, han vuelto a abrir sus puertas esta semana, a raíz de la orden 399/2020 del Ministerio de Sanidad, publicada el pasado 9 de mayo en el Boletín Oficinal del Estado, mediante la cual se flexibilizan las restricciones del estado de alarma por la crisis sanitaria del COVID-19. Una buena noticia para las empresas y para los vecinos del municipio, siempre que tanto los negocios como la población en general actúen con responsabilidad.
La Concejalía de Empleo, Desarrollo Local, Comercio y Turismo del Ayuntamiento de Agüimes insiste en la necesidad de extremar las medidas de prevención en todos los establecimientos, en aras de proteger a los trabajadores y a los clientes ante cualquier riesgo de contagio. Así, recuerda que los comercios minoristas con superficie inferior a los 400 m2 podrán abrir sus puertas sin obligación de cita previa, pero respetando un aforo máximo del 30% de la capacidad del local. No podrán abrir, no obstante, aquellos comercios de superficie mayor o que se encuentren en centros comerciales sin acceso directo e independiente desde el exterior.
En cuanto a la restauración, se pueden reabrir las terrazas, limitándose al 50% de las mesas permitidas en el año inmediatamente anterior, en base a la licencia municipal. Se permite un máximo de 10 personas por cada mesa o agrupación de mesas y se debe garantizar una distancia mínima de seguridad interpersonal entre los clientes.
Los establecimientos que obtengan permiso municipal para incrementar la superficie destinada a la terraza podrán aumentar su aforo, pero siempre ocupando con mesas y sillas un porcentaje máximo del 50% de la superficie disponible. El aumento de aforo deberá estar asociado además a un incremento proporcional de espacio peatonal en el mismo tramo de la vía pública en el que se ubique la terraza, de forma que se garantice el distanciamiento entre la circulación peatonal y las mesas y sillas del negocio.
Entre cliente y cliente, se deberá proceder a la limpieza y desinfección del mobiliario y de cualquier otra superficie de contacto. Se priorizará la utilización de mantelería de un solo uso, se pondrá a disposición del público suficiente gel hidroalcohólico o cualquier otro desinfectante con actividad virucida, se fomentará el pago con tarjeta, se evitará el uso de cartas de menú y, siempre que no se pueda guardar la distancia interpersonal, se dotará al personal de material y equipos adecuados que aseguren tanto su protección como la de la clientela.