- La Isla afrontará en noviembre la evaluación definitiva de la Asociación de Ciudades y Territorios Vitivinícolas de España
- Cerca de 60 establecimientos se han involucrado en el proceso
- La certificación multiplicará la difusión y el impacto del sector
- La calidad de servicios y productos asociados al vino, el paisaje y la sorprendente diversidad enológica, puntos fuertes de la Isla
Las Palmas de Gran Canaria, 26 de agosto de 2020.- El Cabildo avanza con paso firme hacia la creación de la Ruta del Vino de Gran Canaria con la involucración de casi 60 establecimientos entre bodegas, alojamientos, restaurantes, agroindustrias y comercios que van de la mano en este camino cuya meta es superar en noviembre la evaluación para la certificación oficial que otorga la Asociación de Ciudades y Territorios Vitivinícolas de España (Acevin) y tener el sello antes de final de año.
El calendario fija el mes de noviembre como fecha para que Acevin examine y audite la Ruta del Vino de Gran Canaria para su inclusión en el mapa nacional oficial de territorios donde el vino forma parte de su esencia, cultura y paisajes y se ha convertido en un reclamo turístico.
El Cabildo de Gran Canaria es socio desde febrero de Acevin, que ha ofrecido asesoramiento a la Institución y a sus socios en el proceso para homogeneizar servicios y productos en el marco de su sello, que cuenta además con el respaldo de Turespaña y del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y que se basa en la integración de los recursos como una estrategia de desarrollo socioeconómico integral del territorio y de cooperación pública y privada, destacó el consejero de Sector Primario de la Institución Insular, Miguel Hidalgo.
La fase de lanzamiento ha incluido diversos encuentros de trabajo para el diseño de experiencias y productos enoturísticos que se integrarán en la Ruta del Vino de Gran Canaria y que serán la demostración de una oferta tan original y diferente como sus propios caldos, caracterizados por un patrimonio varietal único, su calidad y su sorprendente diversidad enológica que determina la propia variedad paisajística y climática de la isla.
Los talleres organizados han reforzado la cooperación y los vínculos entre los distintos modelos de negocio relacionados con el vino en Gran Canaria en el marco de este proyecto que relanzará la difusión y el conocimiento de los vinos de la Isla que y que cuenta como socios con el propio Cabildo como impulsor principal, AIDER, Vinigran, el Consejo Regulador de la Denominación de Origen, Gran Canaria Natural y Canarias Activa.
Mientras llega noviembre y se aguarda por el momento en el que se pueda descorchar definitivamente el vino para celebrar la inclusión de la Isla en la red nacional, el Cabildo y el resto de socios tramitan ya la creación del ente gestor de la futura Asociación de la Ruta del Vino de Gran Canaria que velará para sacar el máximo partido a la figura, destinada a ser un gran escaparate no solo del sector vitivinícola sino del propio territorio y de la acentuada personalidad de su mundo rural.