- La producción que dirige Mario Vega regresa al escenario del Auditorio de Agüimes el día 16 de octubre, a las 20:30 horas
- Cuenta con un amplio elenco integrado por Lili Quintana, Ruth Sánchez, Marta Viera, Maday Méndez, Alicia Ramos, José Luis Massó y Rubén Darío
Las Palmas de Gran Canaria, 14 de octubre de 2020.- El Auditorio de Agüimes repone en el marco de la 33 edición del Festival del Sur Encuentro Teatral Tres Continentes, la producción escénica ‘El último viaje de Galdós’, que llega a su escenario el 16 de octubre, en una única función de carácter gratuito que tendrá lugar a las 20:30 horas.
Con dirección de Mario Vega e inspirador texto de los dramaturgos madrileños Laila Ripoll y Mariano Llorente, el citado montaje, coproducido por Unahoramenos y el Teatro Pérez Galdós, cuenta con el patrocinio del Cabildo de Gran Canaria y Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria (patronos de la Fundación Auditorio y Teatro), al que se suma la colaboración del Gobierno de Canarias y del Ayuntamiento de Agüimes.
Mario Vega, director de la obra, explica que el montaje “realiza un recorrido por los delirios de una Galdós muy viejo y al borde de la muerte, cuyos últimos minutos los comparte con los espíritus de las mujeres que marcaron su vida, desde su madre Dolores a su prima Sisita, pasando por Lorenza Cobián, madre de su única hija, Emilia Pardo Bazán, Concha Morell y su fiel Francisco, que realiza su último viaje con él”.
Teatro inmersivo
‘El último viaje de Galdós’ es un convincente y conmovedor retrato humano que aborda, desde la ficción, los últimos días de un Galdós anciano que busca reconciliarse con las principales mujeres que transitaron por su agitada vida.
Interpretado por un elenco coral de actores y actrices integrado por Lili Quintana (Dolores), Ruth Sánchez (Emilia), Marta Viera (Conchita), Maday Méndez (Lorenza), Alicia Ramos (Sisita), José Luis Massó (El señor circunspecto) y Rubén Darío (Benito Pérez Galdós), ‘El último viaje de Galdós’ cierra la trilogía planteada desde 2018 por el denominado ‘Laboratorio Galdós’, un proyecto de experimentación escénica que en los próximos tres años se refundará con una dimensión más internacional para vincularse, desde Gran Canaria, a teatros y espacios escénicos de Europa (Francia), África (Burkina Faso) y América Latina (Colombia).
El magnético poder de la memoria
Los dramaturgos Laila Ripoll y Mariano Llorente, ambos fundadores de la compañía Micomicón y galardonados en 2015 con el Premio Nacional de Literatura Dramática y el Premio Max a la Mejor Autoría Teatral por su obra ‘El triángulo azul’, abordan con extrema delicadeza en este texto el complejo imaginario del universo galdosiano en su último tránsito, rodeado de personajes que le reclaman un espacio a su lado en el postrero instante y en el que él mismo es incapaz de recordar si murieron ya o aún siguen vivos.
En ese viaje definitivo don Benito se verá asaltado en su tramo final por los ecos de personas y personajes a los que amó, a los que rechazó, a los que olvidó… Se agolpan imágenes en su mente, aunque él ya no es dueño de nada. Desde la escritora de carácter Emilia Pardo Bazán y Lorenza Cobián –madre de su única hija–, a la actriz judía Concha Morell, pasando por su madre, Doña Dolores, o su pizpireta prima Sisita, su primer amor reconocido de juventud que lo marcaría mientras estudiaba Bachillerato en la isla. Todas ellas transitan en este fresco entusiasta sobre el magnético poder de la memoria y el perdón. El sublime y connotado Galdós se deshace para convertirse en un ser humano enfermo y debilitado, que enfila sus días hacia el momento en que se van larvando las ecuaciones que lo conducirán al epifánico final. Será el último viaje de Galdós. Hacia 1915, cuatro años antes de su fallecimiento con 76 años, Galdós escribió que su mundo se desvanecía en las tinieblas.
A su zozobra anímica y a la fragilidad de su anciano cuerpo se suman en esta función los reproches de las mujeres que regresan del más allá de su conciencia, para reclamarle el capital del amor que pudo haber sido y no fue. Postrado en su silla, Galdós, “un viejo que huele a orines”, como admite durante un diálogo con Concha Morell, recuerda que la muerte tiene una memoria prodigiosa: No se olvida de nadie. La tempestad lo arrastra al abismo, pero no a la nada. Lo que no es posible merecer por la justificación de sus éxitos y fracasos, se alza ante él como un Todo. Es ese instante en el que está solo y ha de enfrentarse con su yo más auténtico. En la última escena de la obra Pérez Galdós le dice a Emilia Pardo Bazán: “Ya está, Emilia, ya está… Dile a Dios que pase”.
En el equipo creativo de la producción figuran Iván Negrín en la iluminación, Nauzet Afonso en el diseño de vestuario y caracterización y Carlos Oramas, en los arreglos musicales con su guitarra romántica del siglo XIX y tiorba elaborados alrededor del Andante Largo Opus.5 de Fernando Sor y fragmentos de Giovanni Girolamo Kapsberger.
Mario Vega ha compaginado las producciones de ‘El último viaje de Galdós’ con el poético ‘Todo el cielo’ y ‘Moria’, otro proyecto de teatro inmersivo al que castigó la pandemia y que será reestrenado en la Sala Insular del Teatro el próximo enero de 2021.
Muchos autores y autoras españolas han reivindicado a Galdós. Uno de ellos, Rafael Chirbes, apunta que el novelista canario, “a la chita callando, sin aspavientos, supo que toda la gran literatura nace en lucha contra la literatura que existe, porque una nueva obra literaria inaugura un lugar desde el que mirar”.