Santa Cruz de Tenerife, 23 de abril de 2022 En la reunión que mantuvo el Comité de Huelga de SEMCA el jueves 21 de abril con la Directora de Recursos Humanos del Servicio Canario de la Salud, la Administración, lejos de mostrar ninguna actitud de acercamiento a las propuestas razonables de este Comité para poder llevar a cabo una huelga efectiva y que, al tiempo, la atención a los usuarios se resintiera lo menos posible, ha impuesto unos servicios mínimos abusivos sin que se haya tenido en cuenta ni tan siquiera una de las alternativas ofrecidas.
A la actitud nada colaborativa mostrada por la empresa generadora del conflicto (Servicio Canario de la Salud), hay que sumar las declaraciones del Consejero Blas Trujillo, en la TVE-Canarias del 20 de abril, en la que se dirige a los médicos que le han declarado una huelga por segunda vez en dos años y les exhorta a que “impere el sentido común”.
Todo ello pone de manifiesto la nula disposición del Consejero de Sanidad a tratar directamente con los miles de médicos y facultativos a los que sigue manteniendo con contratos en fraude de ley.
LA GOTA QUE COLMA EL VASO
Por último, la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de los miles de médicos y facultativos organizados en torno a la Mesa de Confluencia y el sindicato SEMCA, ha sido la información que se ha divulgado ayer, 22 de abril, al término de la sesión de la primera de las reuniones de grupos de trabajo de la Mesa Sectorial de Sanidad. Según ha trascendido, el Director del SCS, Conrado Domínguez, ha hecho entrega de un listado de plazas disponibles para ofertar en los procesos selectivos extraordinarios que habilita la Ley 20/2021, de 28 de diciembre, muy inferior al que tiene censado la Mesa de Confluencia, servicio a servicio y hospital a hospital del archipiélago. Ya avisamos al pedir reuniones desde hace tres meses al Consejero de Sanidad, que había que retomar las negociaciones en el foro de trabajo que se acordó en julio de 2020 con el Presidente del gobierno canario, a fin de tener bien identificadas todas las plazas susceptibles de salir ofertadas por Concurso de Méritos según
las disposiciones sexta y octava de la citada Ley, así como las que debieran ofertarse en un Concurso Oposición de condiciones especiales conforme a su artículo 2.1. El Consejero se negó a establecer los dos grupos de trabajo que le propusimos el año pasado para identificación de plazas y para el estudio de formulaciones de bases y baremos para los procesos selectivos que, previsiblemente, iban a poder quedar habilitados con la ley que el Congreso iba a sacar adelante, como así fue al quedar aprobada el 28 de diciembre de 2021. Se volvió a negar por segunda vez, el pasado 13 de abril, a restablecer los canales de trabajo y estudio suspendidos en diciembre de 2021, cuando de buena fe, la Mesa de Confluencia desconvocó la primera huelga en espera de la legislación básica estatal que reclamaban los consejeros de Sanidad y Administraciones Públicas como imprescindibles para habilitar los procesos selectivos de consolidación que reclamábamos en nuestros dictámentes. Ahora vemos el porqué de su doble negativa. Queda a la vista que no tienen identificadas las plazas ni el número correcto que se debe tener listo para cada uno de los dos procesos selectivos de estabilización que la Ley exige quede publicado como tarde el 31 de mayo de 2022.
El sentido común al que ha aludido el Consejero de Sanidad como carente entre los médicos, es, precisamente, el que debe imponerse a sí mismo para desactivar una huelga que solo puede causar problemas en la asistencia a los pacientes.
Si el Presidente Torres quiere que se lleven a buen puerto los procesos selectivos de estabilización por los que miles de médicos llevan esperando tres años -ahora obligados a hacer una segunda huelga para defender su derecho-, y si desea que se desactive este conflicto, no ha elegido a los mejores gestores para ello. De hecho, prevemos que lo que suceda más probablemente, de no establecerse un diálogo directo y constructivo con este Comité de Huelga, sea su recrudecimiento.