- La propuesta de la Concejalía de Cultura, confeccionada por el belenista local Nacho Maya, rinde homenaje al 800 aniversario de la creación del primer belén en Greccio (Italia)
- Más de 100 figuras artesanales de barro cocido y lienzadas recorren un decorado de 20 metros cuadrados ambientado en el Nazaret bíblico
La Casa Condal de Maspalomas acoge hasta el próximo día 5 de enero el belén municipal de figuras armado por el artista local de San Fernando de Maspalomas Nacho Maya Carro, con la colaboración de su padre, Gerardo Maya Mallarini. Este año el belenista se inspira en el 800 aniversario del primer belén y ofrece a los espectadores una investigación literaria e histórica sobre este arte navideño a cargo de la filóloga hispánica Elisenda Romano y del estudiante de Historia Alberto Quintana González.
El portal creado por Maya Carro, técnico superior en Artes Plásticas y estudiante de Primero de Historia del Arte, ocupa una superficie de algo más de 20 metros cuadrados. En la representación, hecha a escala y con perspectiva, se han instalado más de 100 figuras artesanales de entre 12 y 21 centímetros, fabricadas en barro cocido y lienzadas con ropajes hebreos, procedentes de la región de Murcia.
El belén se ofrece como una propuesta de ocio para disfrutar en familia durante estas navidades. Puede visitarse de lunes a viernes, de 16:00 a 20:30 horas. Responde a una iniciativa municipal de la Concejalía de Cultura que dirige la segunda teniente de alcalde, Elena Álamo Vega, y que coordina la edil Esther Delgado, que se ha incluido en el amplio programa de actividades navideñas que propone este ayuntamiento.
El montaje de este belén se inició en la semana del 23 de noviembre y se ha confeccionado con distintos materiales como el poliestirenotileno expandido, escayola, madera, corcho y cinta de carrocero, entre otros. En su estampa visual destacan el armazón del castillo de Herodes, una fuente y una cascada con agua corriente, y también las llamativas y destacables figuras en movimiento, adquiridas por el propio Maya Carro en diferentes establecimientos de Canarias y la Península, sobre todo en la feria de belenes de Sevilla. Las figuras del nacimiento son pequeñas obras de arte de la colección de 2009-2011 del escultor y figurinista madrileño Jose Luis Mayo. Además de las escenas pastorales típicas y tradicionales que contribuyen al adorno ambiental, el portal ofrece a los espectadores en orden cronológico la representación figurativa de todos los misterios antes de culminar en el ‘nacimiento’.
En esa configuración sobresalen como un homenaje las escenas de trabajos rurales, como la cogida-varada de aceitunas o la ganadería, y especialmente las representaciones de oficios artesanales como la cestería o la herrería. También son muy llamativas las escenas dedicadas a los hojalateros, hilanderas, ceramistas, panaderos y carpinteros, e incluso el puesto de venta de pescado. También sorprenden los detalles que ofrecen las edificaciones y el logrado entramado de callejuelas, y la disposición de los elementos de ornamentación vegetal.
Como guiño de juego interactivo para chicos y grandes, el artista ha ubicado estratégicamente dentro del belén las pequeñas figuras de un ratón y un conejo que hay que encontrar. Esa búsqueda contribuye a fijar la mirada en los detalles de cada una de las escenas que están representadas, generando expectación y un grato entretenimiento visual sobre los elementos artísticos que dan vida a toda la representación.
Este año el belén municipal de Nacho Maya cumple su séptima edición. Cada una de ellas ha sido diferente. El primero lo realizó con 15 años en la biblioteca del Centro Cultural Maspalomas en el año 2016. En esta ocasión, la propuesta del belenista se complementa con una investigación histórico literaria llevada a cabo por la filóloga hispánica Elisenda Romano (Maspalomas), y el estudiante del último curso de Historia Alberto Quintana González (Arucas).
Exposición histórico-literaria
Ese trabajo de investigación que acompaña al belén se ha trasladado a las paredes expositoras de la Casa Condal en 11 paneles informativos de mediano formato dedicados al 800 aniversario de la creación del primer Belén en Greccio (Italia), en el año 1223, por San Francisco de Asís, convertido con posterioridad en el patrón de los belenistas.
El trabajo investigador de Romano aborda las alusiones literarias que se han hecho a la Navidad y el portal de Belén desde la Edad Media hasta la actualidad, desde el drama litúrgico del ‘Auto de los Reyes Magos’ (s. XII-XIII), hasta las publicaciones realizadas este año por Alice Oseman (‘Este invierno’), Cherry Chic (‘Imperfectas Navidades’), Mónica Gutiérrez (‘Una Navidad en Escocia’) o Joanne Fluke (‘Navidad, dulce Navidad’).
La filóloga bucea en el Siglo de Oro para encontrar referencias belenistas en poemas de Lope de Vega e incluso en ‘El Quijote’ de Miguel de Cervantes, pero también en la obra del escritor alemán Johann Goethe. Mas detallada es la investigación realizada en las obras del grancanario Benito Pérez Galdós, Emilia Pardo Bazán, Leopoldo Alas Clarín y Ramón del Valle Inclán.
Por su parte, la investigación efectuada por Alberto Quintana se ofrece como un recorrido histórico del belén como representación religiosa y artística desde la Edad Media. Aborda las manifestaciones belenistas del arte paleocristiano (Catacumbas de Santa Priscila, en Roma) y de manera especial su expansión por Europa en la plenitud del gótico (s.XIII) a raíz de la creatividad del escultor y arquitecto florentino Arnolfo di Cambio y la llegada del belén al ámbito hispánico en los siglos XIV y XV introducido por las órdenes franciscanas y clarisas en el Levante peninsular. También alude al fomento de la instalación de belenes en los templos como muestra de arte popular y elemento de devoción impulsada por la Reforma Católica y el Concilio de Trento; su expansión barroca por toda Europa con figuras destacadas de los artistas portugueses Machado de Castro y Antonio Ferreira, y su llegada a América. Asimismo aborda la expansión de los belenes como tradición doméstica en el s.XVII, donde sobresalen la belenista Luisa Roldán ‘La Roldana’ y Francisco Salzillo, que contribuyeron a expandir el arte de la escuela belenista española iniciada por Juan Martínez Montañés y que culminó en las escuelas de Olot de José Miranda y los hermanos Manuel y Juan Antonio Griñán.
El historiador dedica un pasaje especial al belén napolitano barroco y dramático y su llegada a España con el reinado de Carlos III, “que supuso un impulso fundamental a la costumbre de los belenes domésticos”, afirma. También se detiene en el Belén en Canarias, detallando que uno de los ejemplos más antiguos y de mayor interés de este arte en el Archipiélago “se encuentra en el Nacimiento genovés de finales del s.XVII y principios del s. XVIII traído desde Italia a San Cristóbal de La Laguna (Tenerife) por Diego Lercaro”.