- “Es urgente que el Gobierno de Canarias regule los lugares y criterios de gestión de las colonias felinas para paliar sus efectos negativos sobre la fauna amenazada”
- El Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 ha comenzado a subvencionar su implantación sin desarrollar el artículo 40 de la Ley 7/2023, de 28 de marzo, de protección de los derechos y el bienestar de los animales: “Criterios para la definición de procedimientos de gestión de colonias felinas para evitar los efectos significativos de los individuos que habitan dichas colonias sobre la biodiversidad circundante a las mismas”
La Asociación para la Conservación de la Biodiversidad Canaria (ACBC) muestra su rechazo frontal a la implantación de las colonias felinas sin criterios de conservación, lo que supone una seria amenaza para la fauna silvestre del archipiélago.
La asociación recuerda que el pasado 3 de noviembre envió al Gobierno de Canarias una propuesta (ver anexo) que incluye los lugares donde no se podrían establecer colonias felinas así como criterios para su gestión, sin que hasta ahora recibiera respuesta. “El impacto de las colonias felinas en otras especies es muy serio, por lo que su regulación es urgente”, indican desde ACBC.
Esta proposición había sido enviada al Ejecutivo canario tras la reunión mantenida el 17 de septiembre con el consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Soberanía Alimentaria, con el director general de Ganadería y con el jefe de servicio responsable de Bienestar Animal, del Gobierno de Canarias.
“Nos comprometimos a enviar una propuesta para el desarrollo reglamentario del artículo 40 de la Ley 7/2023, de 28 de marzo, de protección de los derechos y el bienestar de los animales. En ella incluimos los criterios para la definición de procedimientos de gestión de colonias felinas para evitar los efectos significativos de los individuos que habitan dichas colonias sobre la biodiversidad circundante a las mismas, pero no obtuvimos respuesta”.
Subvenciones del Ministerio
Aunque no se hayan establecido criterios de gestión, el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 ha concedido subvenciones a los ayuntamientos de Icod de los Vinos (97.500 €), El Sauzal (30.161 €) y Buenavista del Norte (19.153 €), en Tenerife, y al Cabildo de Gran Canaria (92.900 €), para el control poblacional de colonias felinas mediante el método de Captura-Esterilización-Retorno (CER), tal y como publicó el BOE el pasado 11 de enero.
Como es sabido, la ACBC, durante la tramitación de la Ley 7/2023, de 28 de marzo, de protección de los derechos y el bienestar de los animales, manifestó su rechazo a la adopción del método CER para el control de las colonias felinas en espacios abiertos no acotados.
“Su ineficacia ha sido probada y su implantación en Canarias constituye una amenaza para numerosas especies de fauna nativa. Pese a ello, los partidos políticos impulsores de la Ley rechazaron nuestras propuestas alternativas y, finalmente, dicho método ha sido asumido y regulado por ella”.
Depredadores por instinto
Para la ACBC, “es necesario dejar claro que, aunque los gatos estén correctamente alimentados, depredan por instinto las especies silvestres, lo que es especialmente grave en territorios insulares por el alto número de endemismos y especies amenazadas que albergan”.
Los gatos depredan en el mundo más de 2.080 especies, de las cuales 347 (16,6%) presentan algún riesgo de conservación. En los ecosistemas insulares, los gatos consumen 797 especies, de las cuales un 25% están amenazadas.
En Canarias, forman parte de su dieta más de 60 especies entre las que destacan los lagartos gigantes amenazados de extinción de La Gomera, El Hierro y Tenerife, o el pinzón azul de Gran Canaria.
Impacto sobre la fauna silvestre
En concreto, las colonias de gatos en espacios abiertos ocasionan un fuerte impacto sobre la fauna silvestre, tanto en ambientes urbanos como rurales, donde depredan lagartos, lisas, perenquenes, canarios, capirotes, mosquiteros, mirlos, gorriones, etcétera, muchas de ellas protegidas además por ley.
A pesar de esto, considerando que el método CER para la gestión de colonias felinas, aplicado en espacios abiertos no acotados, se está implantando ya en varios municipios de Canarias para tratar de reducir sus impactos y conservar el patrimonio natural del archipiélago, “es imprescindible y urgente que el Gobierno de Canarias regule la implantación de las colonias felinas”, insiste la asociación.
“A tal fin, debe desarrollar sin más dilación los `Criterios para la definición de procedimientos de gestión de colonias felinas para evitar los efectos significativos de los individuos que habitan dichas colonias sobre la biodiversidad circundante a las mismas´, tal y como indica la Ley 7/2023”, concluye la ACBC.