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Aumentan un 60 % los accidentes en montaña tanto de deportistas como de excursionistas
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Una persona suspendida de un arnés e inconsciente corre el peligro de no superar los 15 minutos con vida
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Advierte de la necesidad de realizar actividades de aventura tras formarse también en la resolución de posibles incidencias
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El Consorcio prevé equipar puntos críticos para posibles rescates
Las Palmas de Gran Canaria, 31 de agosto de 2024.- Los bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria han equipado para rescate una pared de 140 metros de altura de la cumbre utilizada por escaladores dada su complejidad y espectacularidad, de modo que ante cualquier incidencia, el personal de emergencias podrá realizar evacuaciones en condiciones de seguridad tanto para las víctimas y como para los propios bomberos.
Esta acción se enmarca en la constatación de que los accidentes en media montaña se han incrementado un 60 por ciento en Gran Canaria desde la pandemia, tanto de excursionistas como de deportistas, por lo que el Consorcio ha iniciado a modo preventivo el equipamiento de puntos críticos, ya sean enclaves que concentran un alto índice de incidencias como puntos en los que, de producirse, el rescate sería complicado sin una preparación previa.
Gran Canaria, con su orografía irregular, rota e imponente, está plagada de riscos y grandes paredes de hasta 250 metros, así como otros accidentes geográficos tan espectaculares como peligrosos si se acude a ellos sin preparación, un fenómeno que también se ha observado tras la pandemia y ante el cual los bomberos quieren advertir de la necesidad de realizar actividades en la naturaleza solo bajo la necesaria preparación y previsión, además de no olvidar que, ante una incidencia, también se pone en riesgo a los propios rescatadores.
En el caso de excursionistas no puede faltar el agua, un teléfono cargado, un frontal, protección solar, abrigo y calzado adecuado, entre otras, además de estar federados o asegurados para la ocasión. Los deportistas, por su parte, además de manejar la técnica y tener experiencia, deben estar preparados para responder ante una incidencia, como es el caso de las actividades en las que los practicantes pudieran quedar colgados puesto que una persona suspendida de un arnés e inconsciente corre el riesgo de no exceder los 15 minutos con vida.
Por este motivo es tan importante la prudencia y la preparación realizada por los bomberos, pues permitirá actuar con mayor rapidez, sobre todo si el accidente se produce en situaciones meteorológicas adversas como niebla, o por la noche.
Más de 140 metros de caída
Las técnicas utilizadas por el Consorcio de Emergencias para preparar paredes minimizan el número de anclaje en pro de un “rescate ecológico”, subraya Ismael Pitti, cabo especializado en rescates de altura y responsable de esta acción, quien diseñó junto a otros técnicos en rescate del Consorcio, una instalación de seis anclajes ubicados de manera estratégica para realizar los movimientos y posicionamientos necesarios para una eventual evacuación.
Tras el diseño de la instalación, un equipo de bomberas porteó material pesado durante más de dos kilómetros, desplegaron cuerdas, arneses poleas y mosquetones, entre otros materiales, e iniciaron su trabajo en la vertical.
La pared quedó preparada para que puedan actuar un equipo de tres técnicos en rescate vertical, entidad propicia para la intervención en grandes paredes en las que hay que alcanzar lugares de difícil acceso, estabilizar a las personas accidentadas, manejar un sistema de evacuación y acompañar a las víctimas si es preciso. El sistema tiene una capacidad de evacuación simultánea de hasta cinco personas, por ejemplo, dos cordadas de escaladores, cuatro en total, acompañados por un técnico en rescate del Consorcio de Emergencias.
Se trata de un enclave que precisa gran especialización, tanto por parte de los deportistas como por parte de los rescatadores, por lo que además de haber quedado preparada para rescates, será el lugar que utilizarán próximamente para realizar entrenamientos y formación para una mayor especialización del propio personal del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria.