El pasado 4 de octubre, el Gobierno anunció un nuevo proyecto sobre “la baja laboral flexible”, pero, ¿a qué se refiere este concepto? El concepto de baja laboral flexible se refiere a la posibilidad de que un trabajador, que se encuentra en situación de baja por incapacidad temporal, pueda optar por trabajar a tiempo parcial de manera voluntaria. La aparente intención que hay detrás de esta medida es facilitar una reincorporación progresiva del trabajador a su puesto de trabajo. Sin embargo, surge la duda sobre el verdadero propósito de esta modificación en el régimen de incapacidad temporal. ¿Realmente se busca beneficiar al trabajador?
Tenemos que partir de la base de que la decisión de encontrarse incapacitado o no para trabajar debe ser tomada por un profesional médico, encargado de evaluar si el trabajador está en condiciones o no para seguir trabajando. Por lo tanto, si el médico, que es la persona competente para tomar esta decisión basándose en su formación y experiencia, determina que el trabajador no está en condiciones para trabajar, ¿cómo es posible que sea compatible el hecho de que una persona que se declara incapacitada temporalmente pueda trabajar? Jurídicamente, resulta incompatible que este mismo trabajador pueda optar por realizar tareas laborales. Además, ¿no implicaría esto una posible prolongación en el proceso de recuperación del trabajador? En consecuencia, si a esto le sumamos el problema que existe en la sanidad pública a la hora de dar asistencia médica, todo esto podría tener repercusiones negativas en la salud del trabajador y choca directamente con el concepto de “baja por incapacidad temporal”.
En mi opinión, creo que la realidad tiene más bien un trasfondo político y económico, ya que en España el gasto que suponen estas bajas por incapacidad temporal ha incrementado considerablemente, suponiendo una mayor inversión para el Gobierno.
Sin embargo, ¿es la baja laboral flexible una solución a esta problemática, o incluso podría generar un problema mayor, incrementando aún más el porcentaje de bajas por incapacidad temporal? Aunque se ha mencionado la existencia de numerosas bajas fraudulentas, la implementación de esta nueva medida podría facilitar que algunos trabajadores se aprovechen de las bajas parciales para reducir su carga laboral, lo que podría desestabilizar el sistema. Todo ello podría generar mucho más absentismo laboral del que ya existe actualmente.
Por lo tanto, podemos observar que, además, frente a las empresas, esto genera un desamparo al trabajador, pues esta nueva norma podría llevar a abrir las puertas a posibles coacciones por parte de las empresas, obligándolos de cierta manera a su reincorporación al puesto de trabajo antes de lo esperado o incluso, de lo que sería recomendable para su salud, vulnerando así los derechos del trabajador, y siendo posible de correr el riesgo de que un empresario sugiera al trabajador trabajar parcialmente mientras se encuentre incapacitado temporalmente, dada la relación de superioridad que hay del empresario al trabajador.
Aunque los detalles específicos del proyecto aún están en desarrollo, a priori podría pensarse que nos encontramos ante un proyecto que lo que pretende es bajar la tasa de bajas laborales, ya que actualmente está suponiendo un gasto mucho mayor por el considerable aumento de las mismas.
Sin embargo, opino que, esta situación debería abordarse de manera diferente, mediante el control de las bajas a través de una inspección más exhaustiva sobre las mismas, ya que, además de lo mencionado anteriormente, la nueva “baja laboral flexible” podría generar un incremento en los conflictos legales entre empleadores y empleados, lo que a su vez podría sobrecargar aún más el sistema judicial.
Cristina Vega Ortiz, abogada laboralista.
Despacho Jurídico Orive & Ramírez.
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