El Consorcio de Emergencias de Gran Canaria registró 26 activaciones en 2019, mientras que este año ya ascienden a 47, uno por semana
80 personas, incluidos bomberos de Málaga, Madrid, Vizcaya, Mallorca y Brasil, entre otros, asistirán a las I Jornadas de Tecnificación en Media Montaña
Incluirán prácticas en paredes y taludes, incluida una inédita en España
Gran Canaria, 22 de octubre de 2024.- El Consorcio de Emergencias de Gran Canaria fue activado en 26 ocasiones por incidencias en media montaña en 2019, mientras que este 2024 ya contabiliza 47 accidentes con distintos desenlaces, en ocasiones fatales, lo que supone un incremento del 80 por ciento, un importante aumento que ha llevado al ente grancanario a organizar las I Jornadas de Tecnificación en Intervenciones en Media Montaña para afrontar esta nueva situación y que ha tenido una gran acogida con 80 inscritos de diversas instituciones y cuerpos de Canarias, el resto de España y hasta uno de Brasil.
El presidente del Consorcio, Pedro Justo Brito, resaltó que el incremento de la afluencia al medio natural tras la pandemia ha hecho que se pase de una media de dos accidentes al mes a uno semanal, aunque lo más llamativo es que el 90 por ciento fueron situaciones evitables, ya que se debieron a imprudencias o falta de preparación, ocho de cada diez protagonizadas por residentes, de modo que este primer encuentro dedicará un apartado a la necesidad de realizar actividades seguras y a que la población tome conciencie de que a mayor respeto a las medidas de seguridad, menor número de incidencias.
El encuentro será el próximo fin de semana con el objetivo, ahondó el gerente, Emilio Duch, de capacitar a los 30 bomberos que ejecutarán las cinco prácticas, lo que conllevará un valioso intercambio de técnicas, abordajes y experiencias. Pero el Consorcio, subrayó, no solo ha querido poner en contacto a los bomberos, también al personal que interviene directa e indirectamente en una emergencia y acudirán a las charlas otros 50 inscritos entre policías nacionales, sanitarios, Protección Civil y docentes de los ciclos formativos en Emergencias.
Organizar un dispositivo de rescate en altura, progresar hasta la persona herida y evacuarla tras acceder a ella, encamillarla, e izarla o descenderla, según el enclave y sistema empleado, así como manejar la topografía y orientación, serán parte de las enseñanzas.
Se trata de enfrentarse a situaciones que pueden ser reales para que esa no sea la primera. Son prácticas que pretenden trascender la formación que tienen todos los bomberos de primera intervención en trabajo de altura y avanzar hacia una mayor especialización, pues actuar en grandes paredes requiere una preparación superior que se nutre de técnicas espeleológicas y deportivas.
Cae un vehículo por una pared de veinte metros y queda vertical
El cabo Ismael Pitti y el bombero César Martínez, que aseguraron que es difícil tener un accidente si se siguen todas las recomendaciones y que han observado personas en la cumbre en chanclas y tacones, explicaron que una de las prácticas es inédita en el territorio nacional y consiste en una excarcelación en un vehículo que ha caído por una pared y quedado vertical, y al que solo se puede acceder tras descender 15 metros por cuerda y usar colgados equipos de excarcelación para rescatar al ocupante del coche, lo que supone combinar dos especialidades.
Otra práctica novedosa será la progresión descendente con sistema de recuperación de cuerdas, lo que permite afrontar rescates en grandes paredes, incluso de cientos de metros, y que conlleva evacuaciones por la parte inferior, una técnica escasamente introducida en el territorio nacional que conllevará aparejado otro escenario focalizado a la evacuación en este tipo de sistema.
En otros dos supuestos, los bomberos realizarán evacuaciones en situaciones de progresión descendente y ascendente con fraccionamientos, pasos de nudos y péndulos, el sistema más utilizado y que permite evacuaciones tanto por la parte superior como inferior, si bien no permite trabajar en grandes paredes.
En el talud situado tras la conocida Cesta de Tejeda, los paseantes podrán observar la quinta estación, consistente en una evacuación en camilla, necesaria poner en práctica porque su inclinación frente a las evacuaciones verticales y horizontales, la hace diferente y, en ocasiones, más complicada, lo que despertó el interés de bomberos catalanes.
Sin respeto a bienes culturales ni propiedades privadas
Las prácticas serán el domingo, pero antes, el sábado, tendrán lugar las charlas dedicadas a “La asistencia psicológica a víctimas” impartida por la psicóloga Carolina Gázquez, a quien seguirá la enfermera Marta Salas para exponer el “Control de las hemorragias”. La tercera exposición correrá a cargo de Carlos Marcos, guía de montaña, para explicar la “Seguridad en actividades en montaña”, muy importante dado el nivel de imprudencias.
La mañana terminará con la “Conservación y protección de bienes culturales en actividades al aire libre” impartida por el arqueólogo Xabier Velasco porque la escapada hacia la naturaleza que se produjo tras la pandemia no tiene en cuenta bienes de valor histórico, en ocasiones ni propiedades privadas. La tarde estará dedicada a explicar las prácticas previstas del domingo de la mano del sargento Alberto Barrio y el cabo Ismael Pitti, dirigidas tanto a bomberos como al resto del personal, que podrá asistir y conocer así mejor el trabajo de los rescates.
Los bomberos inscritos, además de incluir los de la capital grancanaria y San Bartolomé de Tirajana, así como Tenerife, Lanzarote y La Palma, proceden de Mallorca, Mijas, Málaga, Guadalajara, Vizcaya, Valencia, Granada, Madrid y Paraná (Brasil).